sábado, 9 de noviembre de 2013

Perro come perro y se relame

Leo a Escudier en su blog de eldiario.es y escucho a Jabois, cargar las tintas y las ondas en su seccion en Ondacero, en el programa de Alsina, con los trabajadores de Canal Nou. Ambos cuestionan la valia profesional de los compas. Feo. Lo veo feo. Como minimo inoportuno. Me parece mal. Muy mal. Muy feo. Escudier se cubre mejor las espaldas con una larga introduccion sobre las miserias del oficio. Es lo mas jugoso. Lo otro es lo facil. El palo. A los falderos. Y en el cierre se mira al espejo. Con eso se medio salva pero el titular encabrona. Luego le pone nata. Perro no come perro y eso. Jabois va al cuello desde minuto uno citando a una tal Yolanda y poniendola pistacho. Pobruca Yolanda. Con buena lira enumera los delirios censores de los que mandan y le achaca al que denuncia las presiones que lo haga ahora, cuando esta fuera. Culpa al que traga, no al que manda. Los pajaros disparados contra las escopetas. Los malos son los otros. Vale que sean complices pero que lo que esta podrido es el sistema. Bien me parece que cuenten los puteos que han soportado. Normal que sea ahora. Invito desde aqui a Escudier y a Jabois a que hagan publicos los mangoneos que sufren a dia de hoy con sus actuales pagadores. No vale porfiar de antiguos trabajos. Que se despachen con sus actuales jefes. Espero leerles u oirles pronto el despotrique. No vale ladrar desde el otro lado de la valla. Hay que estar dentro de la finca. Y morder a los guardeses. Eso dicen ellos. A ver si les aplauden las manos que les dan de comer. Que lo hagan. A ver si se atreven. Que sean coherentes y rajen publicamente de sus empresas. Eso le piden ellos a los de Canal Nou. Que lo hicieran antes. Que rajasen de sus jefes en tiempo real. Claro, lo normal. Eso le piden a colegas puteados por un ERE. Lo normal. A Yolanda. Pobruca Yolanda. No tiene sentido dar estopa gratuitamente a compas jodidos que, ante el ordago, se quitan la careta. Careta impuesta y obligada. Y que Escudier y Jabois no tengan eso presente... Con lo cerca que lo han tenido. El primero, ya digo, contextualiza el hijoputismo de la canallesca y da cuartelillo. Que menos. Una poca de compasion. El segundo se ceba sin motivo. Para mi es darle la vuelta de tuerca por el lado mas debil de la tuerca. Culpar a los que han echado. Tacharlos de indignos. Se la cogen con papel de fumar y se pasan de audaces. Joder, es un oficio. Es nuestro oficio. Se han cargado a mas de diez mil periodistas... La crisis y tal. Caen cabeceras por meses. Desaparecen medios por doquier. En fin. Crisis. Y tal. Pero que da para reflexionar. En otra linea. Que alcance a medios publicos. Sin dar palos, digo. Es todo lo mismo. Gente en la calle. En Canal Nou a mil trabajadores... Se dice pronto. Periodistas otro tanto. Me cago en todo lo que se menea, Jabois y Escudier. Que son amigos. Que son de los nuestros. Que no hay que cebarse. Que tienen hijos. Que se van a la calle. Que no se vale ahora decir que eran marionetas cuando les han cortado los hilos. Le dais al de trapo y no al tirititero. El que monta el escenario. El que se aprovecha de ello. Se equivocan de culpables. Como dicen en las pelis. Un poco de corporativismo, cojones. Aunque suponga bajar temporalmente el liston de excelencia etica e independencia profesional. ¿Es ese el debate? ¿La independencia? Es un interesante debate. Sobre todo en tiempos de crisis. Prefiero hablar en terminos de oficio. La pertenencia a medios nos nubla la vision general, la perspectiva. Que somos todos lo mismo: periodistas. Me da que en otros gremios no se leeria o escucharia esa furibundia, ese revanchismo, ese oportunismo para dar palos, esa absoluta falta de empatia. Que son gente que come de lo mismo. Ya digo... Esto solo pasa entre periodistas. Te echan. A miles. Les echan. Y, ¿se leen columnas de solidaridad? ¿de analisis de los entes? ¿de lo que supone la maniobra politica del cierre? ¿del incremento de audiencia del canal cuando la plantilla toma el mando? ¿acaso se leen o se escuchan voces comprensivas o plumas conciliadoras que en suma defiendan primero a las personas y despues a la profesion en su conjunto, en lugar de ir de francotiradores y afinar punteria con monigotes, que alcen la vista y apunten alto, a los jefazos y buscar a los verdaderos culpables, los politicos? ¿se leen quiza unas reflexiones profundas y bien documentadas sobre el coaccionado de mil modos ejercicio de la profesion periodistica en este pais y en especial en los medios publicos? Pues no. No. Bilis. Sangre. Quina. Mala baba. Se leen o se oyen reproches. Reproches al menos responsable. La firma ejecutora. El indigno. El currito. Ellos se lo buscaron. Se lo merecen. Ellos se lo buscaron. No eran verdaderos periodistas porque tragaban. Ja. Y es de mal gusto. Muy mal gusto. Feo e inoportuno. Cero sensibilidad. Se culpa al debil. Al currito. Que no digo que entre los jefes no haya incompetentes. Y trincones. A espuertas. No me cabe duda. Cabrones de primera fila como fiel reflejo de los dirigentes que les mandan. Pero entre mil trabajadores, un buen tanto por ciento periodistas no me creo que todos sean lameculos, adoctrinados y fieles a la voz de su amo. No me lo creo. Algunos jefes, vale. Pero me niego a creer que todos los periodistas que se ganan el jornal en Telemadrid, Canal Sur, TV3, TVG...o donde sea, que todos esos periodistas que trabajan en medios publicos sean unos vendidos que acaten consignas, se bajen los pantalones y no tengan dignidad profesional. No me lo creo. No todos. Son muchos. Y habra ejemplos de mordazas concretas y al que le habra tocado darse el punto en la boca. ¿Es censurable? Pues, si. Vale. Eso hace o va en el haber del profesional por otro lado. Quiero decir que cada uno hace uso de su credibilidad como quiere o puede. Pero en un sistema injusto no es de recibo apuntar al eslabon mas debil de la cadena. Seamos serios. Perro no come perro pero bien que nos ladramos. Seamos sensatos. Que a los periodistas nos estan exterminando como a los galgos que ya no sirven para cazar. Exterminio profesional de un sector que cubre o debe responder a una necesidad constitucional, el derecho a la informacion. Que es un tema. Que cuando la FAPE saca cifras de destruccion de empleo se nos cae el alma a los pies. Y es que ¿en serio tan inutiles o prescindibles eramos los periodistas cuando las vacas gordas que ahora ni se nos echa de menos? ¿Eramos todos marionetas? ¿Atrezzo mediatico? ¿Comparsas de los pagadores de modulos? ¿Rellenadores de huecos? ¿Era todo mentira? Cuesta creerlo. ¿Viviamos en una burbuja? ¿Los entes publicos son todos burbujas? ¿Acabamos con todos de una vez?¿Es el debate la independencia? ¿La crisis de producto?¿Que nos queda a los periodistas? Se cargan un negocio centenario los gerentes. Ejemplo de plena actualidad: El Correo de Andalucia. Las decisiones empresariales. No los periodistas. Y achacarles que canten al verse en la calle es una mezquindad. Hay que pensar que hablamos de personas. Nombres y apellidos. Yolanda por ejemplo. Pobruca Yolanda. No recuerdo el apellido. Pero vamos que da igual. Que es un drama. Lo que promueven Escudier y Jabois, el sincericidio permanente como por ejemplo hizo hace una semana Carmen Banos, presentadora del Telediario de Intereconomia, que le dijo al realizador que estaba en contra de la entradilla que acababa de leer y como el video entro unos segundos tarde, pues la pillaron en el renuncio. Pueden buscarlo en Youtube. Tiene muchas visitas el video. ¿Bien por Carmen Banos por expresarse de forma independiente? ¿Mal por hacerlo en directo? ¿Cagada del realizador? Y por otro lado, ¿es necesaria la opinion del presentador previa a la noticia o si esta o no esta de acuerdo con la redaccion de la entradilla? No se que pensarian Escudier y Jabois del caso Banos. Lo que no es opcion es irse de los sitios ante las presiones con el paro como lo tenemos no se si es mas cinico o ingenuo. Equivocan el tiro en cualquier caso. Declararse objetor de conciencia de la linea editorial de tu medio no parece la mejor forma de hacer carrera en este oficio. Tampoco digo que ser periodista sea agachar la cabeza y hacer lo que digan. Son personas. Cada cual con sus tragaderas. Pero eso no es lo relevante. Es el ejemplo de lo mal que funciona. Del alcance que tiene el hecho incontestable de que los medios publicos sirven al poder de turno. Y es un agujero negro de gasto publico. Hecho incuestionable numero dos. A partir de esas premisas es comprensible que el periodista independiente no sea valor al alza en lo publico. Por mas que exista la figura del heretico que a mi me la ensenaron en la facultad y que, en cierto modo, abunda en lo publico o abundaba, por lo de dar peso en la balanza a las posiciones ideologicas. Una cosa es la redaccion y otra son los despachos. Al lector o al oyente se le exhime de hacer esta salvedad pero los que nos dedicamos a esto, pues tenemos que hacer hincapie en elllo. En ninguna redaccion de las que he estado he oido consignas. Nunca. Jamas. En los despachos nunca he sabido lo que pasaba. Supongo que en las altas esferas hay movidas. Pero a posteriori. Nunca a priori. Ni directrices. Ni consejos. Ni direccion. Ni nada. Nunca. Jamas. En las redacciones se respira o se respiraba el noble y aleatorio aire convulso de la ultima hora. Claro que los medios se posicionan. Y los que trabajan en ellos pues parten de esa posicion pero el trabajo se desarrolla en plena libertad y a contrarreloj, eso es todo. Y son personas. Cada uno viene ya tocado de casa. Y los habra mas... Como decirlo. Dociles. O practicos. Que no se entretengan con cuestiones eticas. Los habra. El medio lo fomenta. Es el ecosistema. Pero no me creo que todos sean unos cobardes. No me creo que todos se meen encima. No me creo que todos pasen por el aro. A ver. Tienen jefes. Y sus jefes, jefes aun mas jefes que manejan dineros de todos y el palo se lo llevan los periodistas, por indignos. Por querer medrar a costa de silencios. P or falta al juramento hipocratico que deberian firmar los periodistas. Esto ultimo lo suscribo. Nuestro patrimonio, como oficio, es la verdad. Estar al tanto de la verdad. Y cada uno se la administra a su conciencia con la dosis que estima oportuna. O se la traga sin que le haga bola tan ricamente. Pues vale. Que el pelota prospera. Ocurre. Que haya tragones. Que en los medios publicos sea corriente el ensanche de esofago. Estamos de acuerdo. Que se premia a la garganta obediente. Igual que en los medios privados, vamos. Que en lo malo y lo mezquino, somos todos primos hermanos. Las dinamicas de obediencia o llamalo confianza es fundamental en la formacion de equipos. Que es logico que hagan buenas migas o sean de la misma cuerda. Al final es lo que pide el medio. Pero porque te pagan desde un medio publico no creo que tengas que tragar hasta las ultimas consecuencias. No se vale. Y no me creo y no puede ser verdad que no haya un notable grupo de profesionales que cumplen y han cumplido de forma digna. Dentro de los canones, claro. Pero limpiamente. Para entendernos. No me lo creo. No me creo que haya tanta profesion podrida. No me lo quiero creer, sinceramente. Creo que hay un fondo, llamadme ingenuo quiza, de vocacion de servicio publico en las autonomicas o la estatal. Que es un tema. Y los periodistas deberiamos protegernos. Mas alla de cabeceras o color del micro. Defender la profesion y la profesionalidad y no hacer norma de la excepcion o escandalizarse consabida presion de los jefes, los politicos. Los que censuran, presionan o imponen. Los responsables ultimos de declarar perdidas. Es un tema. Va en lo de negocio que tiene el oficio pero no debemos apresurarnos a encender la chimenea con el arbol recien caido y sobre todo si lo han cortado de cuajo. Un poco de calma antes de la escabechina. Creo que incluso Escudier o Jabois cuando se lean o se escuchen a si mismos en unos meses con el tema mas zanjado y menos caliente, se descubren excesivos o innecesariamente virulentos con compas jodidos. Inmisericordes y sobreactuados. Pasa habitualmente cuando el tiempo pasa. Gente en la calle. Al final es solo eso. Y los periodistas en general no podemos ser tan cabrones. En general. Perro come perro y se relame. Nos encantan estos festines cuando otros son fulminados. Nos roemos los huesos. Y ahora que todos estamos flacos y poblados de pulgas pues soltamos dentelladas contra los expedientados, permitiendonos opinar de la cuerda con la que los ataban sus jefes o los bozales que les ponian sus jefes. Y culparles de no quitarselos. Lamerse y relamerse. Da pena dedicarse a esto a veces. Y mi apoyo incondicional a todos los periodistas que esten siendo jodidos en estos momentos. Sea como sea. Animo, valientes.

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