miércoles, 29 de noviembre de 2017

Atrapado en una discusión ajena

el otro día me pasó un caso y quería darle aquí un repaso pero es poca cosa, iba a salir del portal de mis padres y llevaba una bolsa con comida casera muy rica en paquetes de plástico y el ordenador medio asomando de la funda y a punto de caerse, y en la misma puerta que tiene tres escalones, me encuentro a un señor de mediana edad tirando a entera y con el móvil en la mano como esperando a alguien, y pasa otra señora más mayor, tirando de dos perritos minúsculos que diría que eran de la raza yorkshire y cada uno avanzaba en dirección contraria, y ella tiraba de las cuerdas extensibles, al ver el percal pues me paré porque se veía el choquetazo inminente porque cada uno estaba como en su mundo, la señora mayor con los perros por detrás como a dos metros y el tipo dentro de la pantalla del móvil, totalmente ausente y ante esto, pues me quedé inmóvil y ni siquiera bajé los tres escalones, me quedé en el primero con las antenas para arriba y se produjo el impacto, el tio pisó a uno de los perros que chilló con impotencia mientras se revolvía hacia el rodapié del portal, y del tirón que pegó de la correa la vieja casi le hace la tijera y lo tira al suelo. Y dije él: "hay que ver con los perritos" alargando la erre y la i mientras la mujer contestó: "Hay que ver con los móviles que vamos como tontos con los móviles". Y me quedé quieto del todo. Se detuvo el mundo por dos segundos. Que rima y me valdría para una canción. También los yorkshires se detuvieron. El pisado y el otro. Iban ya a rachas. Andando pero no. Un trote torpe con dificultad. Y lo repitieron.
"Ay, los perros"
"Ay, los móviles"
Y en otro tono. Otra cosa. Más imperativo. Con abierta hostilidad. Por ambas partes. Segundo round. Yo diría que esperaban que yo hiciera algo, como privilegiado espectador del encontronazo. O árbitro de la contienda o que tomase partido. Por los canes o por las pantallitas aturdidoras. Por las correas invasoras de acera  o el señor ensimismado y torpón. Ok pero no lo hice. Porque vi que los dos eran bastante culpables cada uno en lo suyo y a mí me tenían parado. De hecho, estuve a punto de saltar:
"Pero oigan, déjenme a mi pasar y ya se pelean ustedes tranquilos todo lo que quieran"
Hombre ya.
Porque eran treinta o cuarenta segundos de frame parado. De freno echado. Y yo iba con prisa. Era la típica visita rápida a la casa de los padres a por avituallamiento y estaba atrapado en el portal. Frente a una discusión ajena. Solo podía saltar las dos correas de los perros o apartar al tipo. Por más desfacedor de entuertos que tiendo a ser, aquí no habia agravio ni ofensa a la que pudiera meter mano. Los dos, mal.  Y es cierto que la mujer iba varios metros por delante de los bichitos peludos que correteaban como nerviosos roedores, para adelante y atrás. Olisqueando cada borde de loseta. Y temerosos. Regazados. Y la señora iba a toda mecha. A tirones. Eso es verdad. Pero también era más mayor. No vieja del todo pero lo suficiente para deberle más respeto. Sobre todo, si le pisas el perro. No sabría decir la edad del tipo pero estaba en los cincuenta seguro. Cuarenta y todos. Con esa edad tuvo reacción de niñato maleducado. De pandillero. Y le achacó lo del móvil como se le dice a los adolescentes en la edad del pavo que no se enteran de nada. Y es verdad que casi se tropieza y se parte la crisma pero pisó al perro. Fue un pisotón. Accidental pero lo fue. Una disculpa no estaba de más. Pero la señora podría haber reculado y reconocer que el perro casi se le metió debajo de la suela.

en fin me mantuve quieto e inmovil
me sorprende como en la red todo el mundo salta a todo en minuto uno y a la primera de cambio, mientras que el mundo real o llamalo como quieras, todos somos tibios y espectadores. Tranquilos. Ausentes. No nos mojamos. Ni siquiera en injusticias peores. En verdaderos dramas. La gente pasa. Pasamos. Yo, el primero. Si acaso sacan el móvil y  graban la escena. Que no deja de ser el colmo de la inhibición del suceso real. Un salto al otro plano de la realidad. Al otro plano de la pantalla.

no tengo grandes conclusiones sobre esto
El perrito y yo fuimos los perjudicados. Esa es mi primera conclusión. Las posiciones ferreas e inamovibles siempre joden a alguien. Alguien es pisado. Alguien paga el pato. El pobrecito yorkshire.... O se ve perjudicado. Siempre hay terceros. En el perjuicio siempre hay terceros. O cuartos o quintos... Esa es la responsabilidad. Y antes de acusar a nadie de nada, pues puede mirarte en un espejo aver que te dice. Antes de reprochar, mira si llevas la correa bien. O si pisas, pide disculpas. Si algo se complica, es porque todos lo hicieran mal antes.
A veces es mejor simplemente mirar. No tomar partido.
A veces es mejor ni escribir.
Pero oye, nos ponemos.... nos ponemos.... y al final nos vemos atrapados en una discusión ajena entres las voces que escuchamos en nuestra cabeza

lunes, 27 de noviembre de 2017

teorizando el rizo

no tengo tiempo para escribir y se suceden los días sin resuello y no doy pie ni pego sello ya lo siento y no escribo o sea, que ando cansado y jodido que parece un pretexto para no darle al texto pero textualmente es que estoy hecho mistos y sobre todo que no asigno un tiempo concreto a esto del libre tecleo porque es frenesí diez o doce horas al día y llega uno sin ganas de blog, casi sin ganas de leer, sin ganas de vivir muchos días, hoy que es lunes por ejemplo o sin ganas de nada y este blog está lleno de nada pero ni por esas, es un círculo sin vicios, es un circulo que hace deporte y come sano, es un circulo aburrídisimo, y el blog se me va quedando aquí, aburridito y en círculo... Cerrado sobre sí mismo.Y a uno le ocupa la programación. Que es todo una mierda. No dan ni una peli buena. Y dices, escribe algo, coño. Lo que sea. Simplemente hazlo. Y a ver, que tampoco lo tengo yo esto barrido ni para recibir visitas. Tengo el blog como la casa, para que no entre ni el gato y tampoco es mi ánimo, de redactar a lo pulcro, a lo limpio, a lo bien pensado, a lo corregido.... No. O es una excusa. Puede ser. Pero que no. Que no mi idea escribir de domingo. Ponerme el traje de la escritura ceremoniosa. Esto es un taparrabos. Y así me siento... Lo que me hace que los dedos se encojan con las nimiedades. Uno quiere épica o buenas anécdotas. Cosas graciosas. Polladas. Lo que sea. Lo que salga. Lo que se pueda. Como sea. Simplemente hazlo. Hacer. Hacerlo. Hacer y hacer sin atender mucho a lo hecho y lo demás, da igual, que sea un ñordo, que sean un ñordonaso, que tire para atrás y lo demás es lo de menos, que decía ese verso feo y da lo mismo que sean guapos o feos los versos o que me rimen las frases, y da igual la tilde o la errata y que sea un caos, vale me gusta incluso, una dignidad del desorden y es bonito o eso creo, que sea tan de entresemana, tan de lunes como es hoy y con tantas mierdecicas, como la vida misma que no está de punta en blanco y te pilla todo con un coletero viejo. Esto es así. Mierdecicas. Migajas. Confusiones cotidianas. Hacerlas. Ponerlas en un papel. Dar un papel. Darles texto a las confusiones. Que entablen diálogo. Y luchar contra la monotonía. O la deriva de las horas de curro y los litros en la cena. O las cosas que pasan. Que no se cuentan. Un campo de batalla de silencios. Es más un trastero que un altar. Es más un abrevadero que un manantial. Son más rimas vagas que máximas que seguir. Que no es que yo me eche tierra, es que intento hacer una madriguera de pensamientos. Sepultarlos en palabras. En muchas. De lo que sea. Hacerlo y no darle vueltas. Solo eso. Hacer. Sin lios. Sin movidas. Sin balance. Sin vuelta de hoja. Sin búsqueda infructuosa. Hazlo y yaestá. Haz. De luz. De rayos. De energía. Haces y pasa. Pasa todo el mundo de lo que haces pero hecho queda. Tenía un post it en mi puerta que se agarró con uñas y dientes al barniz. Hazlo. Una cita de Gorki: Todo pasará, pero lo hecho, hecho queda.
Pues eso. Lo veía cada día al salir. Pegado en la puerta por dentro. Pegado en mí por dentro para los restos. Hecho queda y pegado el post it a la madera durante años. Todo se despegará pero un post it pegado, pegado se queda. Y así se queda. En la puerta. Es lo que me pasa un poco aquí, que digo, pues así. Y así. Aquí. Así se queda. Así me quedo yo. Con esto. Un poco agotado y por otro lado, totalmente despachado. Así se queda todo. Un poco manga por hombro. Un poco desastre. Un poco grandilocuente. Un poco tonto. Un poco como todo. Y que meto de todo, lo más tonto o más de aquí y ahora, lo lees con el tiempo y dices, menudo tontico. Pero oye. Es eso. Es lo que hay. Es lo que haces. Y vale. No hay ninguna necesidad de subirlo, vale con escribirlo. Con uno que lo vive y ya. Con eso sobra. Pero al estar aquí es algo más. El vértigo es más bonito. Y ya. Lo meto todo, todo lo que me tropieza con la cabeza, todos los pensamientos que son como encontronazos y con nulo derecho de admisión a casi ningún argumento y con un listón tan bajo como para que no haya reflexiones enanas, o bailando el mambo justo con esas y lo hago, sin más, como se monta el trenecito en las fiesta o como se caen los naipes o como rompen las olas, con cadencia y furia, con ganas y como sin motivo muchas veces, como sin querer o como el que no quiere la cosa, buscando no sé el qué y eso, esa búsqueda o ese intento, es el motivo, siempre intentarlo. Eso es hacerlo. Hacer. Hacer. Hacer. Y hecho queda. Pasemos. Pasaremos. Pasamos todos los días de todo. Todos pasamos de todo y es como una mierda, pero aquí estamos: hechos. Muy hechos. Como un filete quemado. Hechos y deshechos. Rehechos mil veces. ubo cualquier esputo por escrito que se me atraganta y que tengo que echarlo y no me pongo tanto ni le pongo tanto, mal por mi pero lo hago, que ya es o es que es lo que me importa, aunque escriba sobre nada importante, o ni lo piense o escriba sin pensar o escriba sin leer o escriba sin mirar o escriba sin pensar y que tampoco sabría cómo o qué cambiar, solo sigo y sigo, escribo y sigo y ni tengo nada en especial que contaros ni me apetece darle vueltas a eso, y si no me pongo en plan diario pues tampoco me pasan tantas cosas o nada interesante y bueno, sigo y escribo que, a pesar de mis nulas aventuras en el día a día y de mis muchos cotidianos desencantos, pues me mola venir aquí al desbarre con cierta asiduidad provisto de los pocos y escasos momentos de lucidez, en el vago recuerdo y darle cancha a las ganas de teclear, solo por eso, solo por seguir el rastro, como los perros que huelen todo sin aparente motivo, oler el mundo a través de un blog y querer mearle a todas las esquinas y a escribir con las cuatro ideas que vuelven, como el que se está meando, soltar la verborrea y la vejiga con las dos o tres cosas que se repiten como el ajo o la morcilla y si riman, pues riman y da igual lo demás con la coartada de que es personal, ajá, es un blog personal, pues ya está, es personal, ya está todo dicho, se levanta la veda, no es del todo público, oiga, usted está aquí porque quiere, por no ser, no es ni fácil de seguir y con pocos puntos y pocas paradas y puedo desbarrar con lo que quiera, con lo que sea y con lo que no es, y si a mí me da para ocho párrafos las cosas banales o las cacas, pues mira o las chanzas o los juegos de palabras o las rimitas están que se hacen tan molestas pues para adelante que dejo  mi rastrito o mi estela como cagaditas de perro pues oye, bien, pues dale, haz, hazlo, y ya. Y ya. Eso lo pongo de más. Como nosé. Que lo pongo mucho y está mal. Pero es que no sé casi ná. Y ya. Mejor estaría leyendo que dando la tabarra, estamos de acuerdo. A veces me parecen interesantes o liosas o solo mías las cosas que cuento pero casi siempre me parece que es caca, no nos engañemos pero me entretiene hacerlo o lo son, entretenidas durante un rato y en un modo curioso me relaja o que creo que me sirve para pillar aire o ganar altura o me suena a distinto o me motiva, joder. Motiva. Que es algo importante. O me da por buscar pistas de algo o quiero darle vueltas a nada o solo darle a los dedos o tiene algo o creo que lo tiene o ni algo pero con lo suficiente como para echar un rato o ratos largos o ratos tontos que son la mayoría y es nada. Y no pasa nada escribir de nada. Relaja. A veces. Otras agobia. Pero me siento liberado de la nada. No tanto de dar explicaciones. Es mejor hacer. O buscar o esperar encontrar o darse cuenta de que siempre se encuentra algo. Hacer creer. Creerte tú. Creer a esa voz. O es lo que quiero creer que es una voz o que las cosas me hablan o que tienen algo más detrás, que significan cosas como el que cree en Dios, o en una divinidad o en un sumo hacedor o en las que le echan las cartas o le leen el futuro o los que creen que el destino está escrito o los que piensan que tienen que escribirlo ellos o los que lo dejan en boceto o solo apuntan cosas sin sentido y las dejo y vuelvo y las vuelo a rumiar y casi siempre, se me pasa el nervio o la ilusión o las ganas pues se pasan los dias como se pasa el arroz o se pasa la anestesia o como pasan los reactores dejando un rastro blanco pues esto es el rastro blanco y en cierto modo, vengo a volar, o a batir las alas que no tengo como un amputado con su miembro fantasma y me doy cabezazos como lo hace el cerebro cuando manda órdenes a un miembro que no existe, golpes contra la pared, golpes contra la realidad,  no vengo a golpear las teclas, que es lo que hago, dar golpes y a escuchar su sonido de lluvia y a escribiros así como el que oye llover y ser nube o agua o tormenta aunque solo sea cinco o diez minutos al día, o ser un trueno o un rayo pero mojarse, sobre todo eso, mojarse con algo por estúpido o estéril que sea opinar pero dejarlo ahí escrito, oye, que yo pienso esto aunque ni importe ni deba importar a  nadie y así voy, a trompicones y dando cabezadas, pero bueno eso me pasa siempre que no hay nada que decir y lo digo de todos modos, aun así os doy una brasa de mil demonios, sin decir nada y mira que no hay nada que decir pero aqui vengo, a no decirlo y no contento con eso, lo repito un par de veces, y otra vez, y lo repito y así, como el que oye llover sin saber que la lluvia es él
El blog me sirve para eso, de desahogo o para vestirme de nube y ser un chirimiri que va calando párrafo a párrafo y en estos meses que tengo los nervios hechos trizas y bueno, que se me van a veces y los pierdo, como el que pierde las llaves y el móvil o los papeles y parece que todo el mundo o todo mi pequeño mundo se tambalea o se ve borroso, o simplemente baila como una mesa coja o una silla paticorta pero vaya, el blog me sirve para ser y no ser, como la canción esa horterísima, para ser yo y despacharme y no serlo al leerme y soberamente aburrirme o ni reconocer lo que me pasa o lo que me pesa o lo que pisa o lo que veo en el espejo que no son más que representaciones, como todo lo que está al otro lado de la pantalla y bien, o sea, que estoy bien que nada de lo que he dicho es malo o un `problema, no, no escribiendo en el blog estoy casi mejor que cuando me explayo, lo dejo dormido y sigo viviendo sin pensar en ello, no es la primera vez que pasan un par de meses sin una triste frase, pero es cierto que a veces se me ocurre algo y digo ouyeah me parece que molaria contar esto y darle cancha o algo de esto le veo horizonte pero bueno, los días se solapan, me comen las noches y solo me bebo cervezas con la cena y busco algo que ver para desconectar y luego paso, y solo pongo la tele, y no hago nada, no, bueno, nada en el blog porque hago mogollón de cosas, de las que no se ven reflejadas en los espejos que son las pantallas pero hago cosas y trato de hacer. Solo eso. Sin balances. Sin expectativas. Sin prisas. Solo hacer. Lo que sea. En todo. En cada caso. En cada ámbito. Solo eso. Hacer. Hacer. Hacer. Y deshacer que es hacer pero en sentido contrario. Y voy. Hacer. Hacer. Hacer. Y que sean mierdas, eso es. Pero hacerlas. Dejarlas terminadas. Hechas. Dejar cosas hechas. Que en el blog no es lo que suelo hacer. Lo dejo todo como voy viendo. Como sale. si desde muy temprano y lo llevo todo palante, el grupo está parado es verdad en tema de conciertos pero parece que vuelven a salir canciones o amago de ellas, me parece un poco tonto empeñarme en sacar nuevas porque ya tengo un chorro y más convendría pulirlas un poco, y tocarlas con gusto, pero bueno, esto es como el blog y como la vida en general, que va saliendo como sale y uno hace lo que va pudiendo pero poco dispone y tenia como dos o tres ideas que poner aqui con tan mala suerte que ahora que tengo un ratico de madrugada pues no me acuerdo, lógicamente, de nada
Aun asi tengo un par de teorias con las que voy a intentar teorizar el rizo

Mi teoria de la memoria
No se si os he hablado de esto pero creo que la memoria en general es una hija de puta. La memoria es una gran hija de puta. y a veces lo es en defensa propia porque se te olvida lo bueno y solo recuerdo que fue bueno y lo malo se queda con detalle absurdos, con el sitio, la ropa, la música que sonaba, en fin, toda la escena y la tenemos durante años en la cabeza, una mala noche hecha fotogramas, un mal sueño repetido... Y los buenos ratos, los fines de semana de fiesta, las buenas farras con conquista y coronando, los viajes o las vacaciones que quedan en una foto fija. Una imagen. Un buen recuerdo. Pero super difuso. Una sensación mas que nada, buena pero leve. Esa es la hija de puta de la memoria. La misma que te empieza a joder desde muy joven cuando olvidan algun año o una fecha o lo que sea en un examen. O se te pasa una fecha. Un cumpleaños. Un aniversario. La memoria te jode con pequeños detalles que significan mucho. Porque lo que es lo importante a veces queda solo en flashes. Me pregunto que es lo que se debe recordar. En el blog, no sirve mucho para eso. Ni memorizar. Ni nada memorable. No es un diario siempre lo digo. Tengo una agenda y aunque la llevo más o menos activa en el mes, las semanas se quedan en blanco. Y son como manchas de aceite pero al revés. Como calvas. Calvas en el ánimo. Calvas repentinas que luego se repueblan. Si el ánimo o la fuerza o la voluntad fuera pelo yo tendría mogollón. Pero vendría y se iría. Un día aparecía con un cráter de alopecia y medio mechón fuera del parietal. Y así. Me explico fatal. Un poco a posta. Por mi teoria de la memoria. Lo malo lo recordareis mas. O dejara mella. Os pasará factura. Lo bueno se va en el deleite. Y hay tanto bueno, ojo. Es casi tanto lo bueno. Que uno pienso o intuye que al hacerte viejo te rebelas contra la hija de puta de la memoria. Y eso como, paso. De eso, me olvide. No me jodas más. No me hagas olvidar las fechas importantes y me grabes a fuego los chascos. ¿Por qué haces eso, memoria cabrona? Quieres joder. Es eso. Y ya . La memoria putea. Los días malos pesan más, y se recuerdan. Se hacen largos y tienen eco. Y su huella es más honda en la arena. Y hablando de huellas y de ondas y de hondura, pues a las letras lo aplico igual que lo he escrito por aquí y Paco Loco flipaba y me puteaba tela grabando las segundas voces. Las letras te las tienes que aprender de memoria. Tienes que joder a esa hija de puta. Tienes que darle duro. Y convencerla. En fin, me estoy cansando de esta mierda. También es que es lunes y ayer fue un domingo duro y ayer venía de viaje. Yeah. Me ha acordado de una de esas ideas recurrentes que digo, esto sí, esto mola. esto lo tengo que escribir.

Mi teoría de planta algo todo los días
Pues es eso. Coge tallos. Planta algo todos los días. Coge tallos todos los días. Trocitos de plantas. Que estén por el suelo. Pon esquejes. Esquejes, todos los días. Así de continuo. Lo veo como salvamento de tallos. Recogiéndolo por todos sitios. Y unos nacerán y otros no. O más bien, agarrarán. O no. Que me gusta ese concepto. Para aplicarlo a las ideas. Agarran o no. Tallos. Ideas. Es todo lo mismo. Muchas veces mueren. Pero bueno, merece la pena. Muchas se salvan. Así que hazlo. Todos los días. Aquí y allá. Mini cactus o árboles que lo serán. Y también o sobre todo, lo de robar tallos mola pero lo de salvarlos es épico. Así que hay que centrarse en salvar tallos. Planta todos los días tallos que encuentres. De podas. O caídos de los balcones, hay muchos. Si te vas fijando. No jodas por que sí plantas ni tiestos ajenos. Odio la gente que hace eso. Hay tallos débiles o que están caídos. O que nacen atravesados. Que van torcidos en la maceta. O que salen por otro lado. Que van mal encaminados. Pasa eso en muchos ámbitos de la vida. No arranques el tallo principal. No jodas la planta de alguien. Eso me parece deleznable. Joder tiestos, no. Sanearlos con buena intención y cariño, pues sí. Y plantarlo. Con amor. Y regarlo con cabeza. Y sale una planta nueva. Se produce el milagro de la vida. Creo que esto es una buena teoria a la hora de afrontar cualquier reto o empresa en la vida. Planta todos los días.. Coge tallos de todos los sitios. Unos agarran, otros no. Pero sigue haciéndolo. Así se hace la vida. Así se agarra la vida. Asi se hacen los jardines. Y los contactos. Lo pongo como de símil de trabajo. Semillas de aqui y de alla. Que no son semillas, son todo. Argumentos, puntos de vista, flores, esquejes, ramas rotas... Si limpias un rosal, por ejemplo. Y plantas nuevos bastones. O si saneas una planta de flores. Dejando los nuevos tallos en agua. Que echen raíces. Eso vale en lo de los proyectos. Lo hago de muchos sitios, cuando voy de viaje. Y me lo llevo de recuerdo. En especial, y no sé por qué me encanta coger tallitos de los conventos, cuando por algún extraño motivo los visito. O de sitios especiales. Monumentales. O pequeños, y coquetos. En pueblos.  Me encanta coger tallos de por ahi. Me flipa. Es un detalle un poco de marujona paseadora, lo reconozco pero lo hago y me mola y tengo un montón de plantas en mi jardín que nacieron de pequeños tallitos cogidos al azar. Todas las plantas del jardín tienen una historia. Vienen de algún sitio. Por supuesto que no todas salen adelante. Pero me vale por las muchas que rescato. En los balcones con macetas siempre hay tallos suicidas en las aceras. Y los rehabilito. Y he conseguido que tengan una segunda vida los rosales. Es una tonteria de la que me siento orgulloso, y lo he intentado con limoneros y almendros con desiguales resultados. Se me da mejor con plantas pequeñas. Las crasas y los cactus son mi especialidad. Con el huerto me va regular, tengo poca mano para sacar adelante verduras pero todo se andará. Estoy en ello. Eso es lo de los tallos. Plantar todos los días. Aquí y allá. De hecho, lo hacemos. Deberíamos verlo así porque es así como es. Si plantas sonrisas. pues no recogerás nada porque la memoria es una hija de puta pero no es la única,hay un montón de cabrones por ahí que no sonríen pero si lo haces todos los días y todos los putos días, plantas sonrisas, pues te va a mirar todo el mundo con la cara de el Joker. Es como un mega karma muy potente y muy obvio, que es la vida. Porque los tallos agarran. En la tierra. Pero se agarran a la vida. Y le salen los pelitos blancos. Se agarran al suelo y a sorber sus sales minerales. Y no se rinden. Algunos caen. Pero no se rinden. Quieren vivir. Como los proyectos. Como las ideas. Como los grupos. Como las relaciones. Les salen pelitos blancos y quieren sorber sales minerales y crecen. Hacerse. Agarrarse al suelo. A la verdad. Al piso. A la tierra. Es algo tangible. Ser materia. Ser verdad. Ser. Del todo. No es más que filosofía barata, si ves una planta crasas o carnosa que parecen cactus pero no tienen pinchos, pues coge un tallito que veas ahogado y échale a la tierra. Y usa el mismo mecanismo en todas las facetas de tu vida. Y riega. Todo agarra. Con agua. Y amor.
Regar es importante porque si plantas todos los días y no riegas, pues ná.

Mi teoria de las importancias
Yo creo que estamos todos jodidos con el tema de las importancias. A lo que se da o a lo que no. Todos estamos equivocados. Todos para nosotros mismos pero también unos con otros. El por qué se le da. O no. A qué. Y a qué no. Y etc. Pero en todas las facetas. En todo. Todos. Y tengo un incontestable punto de partida: los patrones de referencia. Están equivocados. Todos. Todos los patrones de referencia están equivocados. Primero por el factor tiempo. Y no podemos acogernos a media de vida. A la esperanza de vida. A baremos. A contrafuertes aritméticos. Está todo equivocado porque falta el tiempo. Lo desconoces.
No hay más preguntas, señoría.
La importancia a todo lo que vaya a pasar mañana es o debe ser relativa. Porque mañana será mañana y hoy pues mira, estás aquí leyendo el blog. Eso es así. Le des mayor o menor importancia, o se la dé yo o no, aqui estamos. Es decir, que nunca sabes. Y de ahí, para adelante. Todo igual. No sabes. Ni tienes certeza ni lo ves claro. No lo sabes, en realidad. Lo presupones. Y todo se cae. Antes siquiera de alzarse. Castillos de naipes. Con foso y todo. En el aire. Así, naipes en el aire. Eso viene a ser el universo. Con un foso mucho más grande, claro. Es por esto, que es dificilmente controlable el deambular de los astros y por otro lado, es perfectamente rutinario. Un azar repetitivo. Que es como teorizar para nada. Como esto, vaya. Como todo. Como este blog, tan lleno de nadas.
Lo contrario de la nada es la acción, hoy. Ahora. Aquí.
Lo de ya.
Y eso es lo importante, opino.
A mi me toca o me tocaba en lo de las noticias. Que segun estudié hace millones de años, habia criterios de noticiabilidad. Que a mi siempre me ha sonado a lo primero que te contaria la vecina . Ese criterio. Lo noticiable. Lo que antes te sueltan. Lo que estan deseando soltar. Y a que se le da importancia. Y a que no: Que lo que le da uno o yo o quien sea, pues importa poco o importa a los que importa pero en sociedad, lo que la gente considera pues ya si que no da a todos, o nos roza. O salpica. Cambian los criterios. No hablo de noticias, hablo de importancia. Pero es una buena manera de medirlo. Si hablamos de corrupción. O de desfalcos. O de estafas piramidales o timos. Los minutos que tienen de tribuna pública. La importancia en el telediario. La importancia social. No en lo morboso de las tragedias, las violaciones o los crímenes. Que siempre están pero en tiempos de moral laxa, están de otra forma. Están peor. Y es una verguenza. Como de machistas son los medios generalistas. Si se trata de crímenes de género, el tratamiento de la noticia ya empieza a ser criminal. Tengo una opinión bastante radical al respecto. Los casos no dejan de aumentar y no creo que dar publicidad sea el camino. Efecto llamada. Más gente lo hace. Quizá se normaliza. Se le quita importancia. Se ve de cotidiano. La importancia de las cosas es también lo que determina que los consumidores pagen por ellas. Y paguen más. A lo que se le da importancia. Hace cuarenta años no existía la ecología. Fue una revolución: Quizá dentro de 40 años no exista el planeta. No se le da importancia. Hay una boina negra en mi ciudad. No importa a nadie. Hablan de las restricciones de tráfico en la capital. Quiero decir, que cambian los criterios. Que se actualizan. Casi siempre para bien. Pero de un tiempo a esta parte, no. Es todo tonteria. Sin sustancia. Sin jerarquía. Las noticias pierden su eje. Pierden su sentido. Y es uno delos motivos de la crisis de los medios. De dar importancia a lo que no la tiene. La principal consecuencia es que los medios dejan de importan. Lo valoran mal. Mucha cobertura a lo superfluo. A la frivolidad. A la anécdota.. Y no mencionan, lo troncal. Esto último es casi más importante. Que obvien lo que más nos determina. El problema de las importancias mal administradas. Luego, está la deriva absurda informativa de la sociedad del espectáculo y la tecnificación del trabajo periodístico. Lo he dicho aquí otras veces, nada tiene que ver el periodisco con el trabajo periodístico. Si hay una convocatoria, no es periodismo. Las ruedas de prensa no son periodismo. Todo mensaje interesado, no es periodístico. No se dilucidan los intereses. Los que se ven y los que no. Y los telediarios viven de cuando dan imágenes de un accidente de trenes en Michigan o una riada en Calcuta pues solo le meten morbo a una imagen de impacto. No importante. Un impacto visual sin importancia. Pero claro. Los medios pierden importancia. La realidad se olvida. ¿Qué es lo importante? Que se mueve. Que se comparte. Que se ve. Que sea verdad o mentira, que sea una cosa de peso o una soplapollez, pues ya no importa. Ya no es importante la importancia que se la da a las cosas. Y parece que no haya un rasero compartido. Cada uno tiene su baremo. Pero no.
No le doy importancia a las tildes. Paso de poner acentos. Y paso de darle mucho sentido a esto. Lo suelto y ya esta. Me acuerdo de cosas. Los tallos. Mi teoria de plantar todos los dias. Eso es importante. El agua es importante. La sed es importante. Que no pasen sed las plantas es importante. También las personas. Si tienes sed, es demasiado tarde. Así con todo. Hay que beber antes. Pues igual con todo: el amor, el entusiasmo, la salud...



hablando de eso
a ver si ceno algo, lo miso luego sigo

martes, 21 de noviembre de 2017

El viernes, oreja



el nuevo programa me ha quedao hecho una monería
y sería menester que el viernes 24
a las 19 horas
sintonizases
el 107.1 fm
pues
le pusieras una oreja
o las dos

o en la web: radioalmaina.org
con el streaming online


jueves, 9 de noviembre de 2017

me deprime que los grupos pongan publi en Facebook

Me deprime que los grupos  pongan publi en Facebook

Y me deprime mogollón porque la cosa está peluda, ok.  Andamos jodidos. Muy chunga, ok. Pero me jode. Hay mil grupos. Hay mil movidas. Todo el mundo pasa de todo. Es todo una mierda enorme. Es una mierda. Nadie te escucha, ok. Tienes que hacer promo. Tienes que darle bombo. A lo que has grabado. A lo que has hecho. Al concierto que vas a dar. Ok. Pero no....Me jode cómo altera la movida el puto Facebook. Me deprime tanto que llega a joder. Joder a dolor. Joder de verdad. Es todo una mierda. Estamos de acuerdo. Pero no hagas eso. ¿Para qué? No va nadie a los conciertos. A los tuyos menos. Hay que alquilar sala. Es un abuso. Las condiciones son imposibles. Para los consagrados, imagínate para los que empiezan. No salen los números ni aunque le vendas entradas a tu cuñado y a todos los de la oficina. Que te las pagan aunque luego no van y ni por esas. Nadie compra discos. Ni camisetas. Ni cds. Ni nada. Es un agujero negro lo de tocar en vivo. Lo otro, es anti materia. Y nunca mejor dicho porque hay un claro problema con el producto. Una crisis de producto. Y ok.  Es una jodienda todo, ok. Pero la crisis de producto no se soluciona con el no producto que es la promo en red social. Ni siquiera en instagram que es menos agresiva. Las visualizaciones dan igual en el mundo real. En los cajetines de cambio de los taquilleros y taquilleras. Porque no. Las visualizaciones no llenan la sala. No llenan más que el ego y a veces. Es la caverna de Platón. Y nadie para la entrada para entrar a la caverna. A mirar desde fuera. Porque este invento del demonio no ha hecho creer que estamos dentro. Que vemos ya. Que es directo. Que es streaming. Etc. Y es como un espejo. Verse. Por cinco o diez o veinte o cincuenta. No es tanto, ok. Y te ves. Es puro egotriping. Es una gilipollez, amigos. Ni los clicks llenan salas, ni las vistas de youtube, ni siquiera los contenidos virales. Los que van a millones tampoco te aseguran una anticipada que te deje dormir tranquilo. Lo viral no es lo real. Hay conexiones, ok. Obvio ayuda y claro que hay casos de éxito. Pero que no. Son caminos distintos. Se llega por otro sitio. Es otra carretera. Es otro modo de transporte incluso. No va por el suelo. Es más etéreo. Son entornos distintos. Que eso da para otra entrada. Y la escribiré. Es otra movida. Aqui apunto a todo. Luego no haré nada como siempre pero aqui se queda como nota mentales a pie de página. Aquí hablo de los grupos. Las decisiones que toman los grupos de músicos. Tengo uno. Y muchos amigos que tocan en otros. Y lo veo. De primera mano. De primera pata. A pie de calle. Todo hijo de vecino. Y me jode. Y me deprime. Mogollón.

Especialmente, me deprime y me jode sin son grupos que me gustan o de amigos.

Me jode cuando un grupo que me gusta pone publicidad en Facebook. Que tienen canciones. Que tienen rollo. Que molan las fotos. Que molan las portadas. Que mola el nombre. Que tienen fechas. Que dicen cosas en las letras. Que tienen carteles guapos. Que se estarán comiendo la mierda, ok pero molan. Grupos que molan y es como... No, no lo hagas. No. No. NO. ¡¡No lo hagas!!
Me jode MUCHO cuando un grupo que me gusta pone publicidad en Facebook. Que me gustaba ya de antes, se entiende. Es deprimente. Es para los grupos malos o que no molan, lo de ponerse ahí. En el expositor.. Es el ultimo recurso de los que no gustan o así lo veo yo. Cuando lo hace un grupo molón es como.... Oh, no. Ah vale que no era tan guay como creía. Me desencanta. Y me desenamora. Y me planteo quitarle el Me gusta. Lo hago. Pirarme. Irme de ahí. Bye bye my friends. Un fan menos. Que es como un gesto muy de despecho. Muy de contigo no, bicho. Hala, pues ya no. Pero es lo que me nace. Se acabó. Es lo que me brota. Que os den. Ya no me necesitas. Ya no me necesitáis. Estáis en otro escaparate. En otra sección. Ciao. Os habéis vendido, Etc. Búscate a otros. Busca oyentes de moda. Busca fans de temporada. Busca en otros caladeros. Tienes presupuesto para pagarte campañas en Facebook, pues a mí no me necesitas. Afortunadamente, me pasa poco. Gracias a Dios porque es un bajonazo. Tengo ojo. Supongo que los grupos que me gustan, me gustan por muchos motivos. Motivos de fondo o de origen que les limita a no hacer gilipolleces. Me gustan por eso. Por no hacer ciertas cosas. Por discretos. Por finos. Por coquetos. Por simplemente no enfocarse en eso. En una promo tan agresiva. En vender la moto. Que van por otro lado. Que buscan otra cosa. Que suenan a otra cosa. Que gastan pasta en otras cosas. O que no gastan nada de pasta en nada. Hay mil cosas en las que gastar el dinero, desde luego. Tener un grupo a veces se reduce a eso. Si tienes un grupo de música, gastas dinero todo el tiempo en todo. Y es siempre un drama lo de la pasta. Pero hay mil cosas que comprar antes de la propaganda, como le llama mi madre. Hay mil cosas antes de publicitarte en una red social. Para que te vean más. Para cambiar el logaritmo. Para que te de más cancha el robot. Es absurdo. Ganar visualizaciones. Ganar visitas pero a golpe de euro. Como si fuera algo la visita. Que sí. Que suman pero  es poco presupuesto. Que es nada de inversión. Que son cinco o diez o veinte o treinta o cincuenta pero da igual. Es tirarlo y además joder el ambiente. El ecosistema de las bandas. Si es que existe, o queda algo... Del entorno natural. O no alterado. Del orden lógico con el que van creciendo los grupos. Lo otro... Lo ciber es ciber... No es real. Entramos en los límites de realidad y ficción. Nada lo es hoy en día pero esto es una burbuja de visualizaciones. La burbuja de visualizaciones que merece otra entrada aparte. Voy a hacer una lista de entradas pendientes. Hablaba antes de los grupos que me gustan pero hay otro apartado: los grupos de mis amigos. Cuando veo publi de un grupo de colegas, se me parte el alma pero como una nuez hecha añicos de un martillazo. Tal cual.

Cuando son grupos de amigos o gente que conozco es mucho peor

Pero decía que me deprime porque en algunos casos tengo relación más o menos con el grupo. Porque son amigos, o hay amigos comunes, o son conocidos o más o menos, sabes o te llega cómo va la burra por donde anda y por donde se para y dice que no. Eso lo hace más chungo porque es cómo... Pero qué coño haces....Es deprimente. Me deprime. Es cierto. Es depresivo. No es que esté mal. Es lo que hay, que se va dando así, solo eso: es lo que hay. Eso te dicen. Que hay que estar en todos lados. Que lo vea la gente. Que lo comparte. Que tal. Es el entorno. Eso es lo deprimente. Que se haya convertido en eso. Que se gasten el dinero que no tienen y el dinero que no les da el grupo, para alimentar la burbuja de las visualizaciones de la que hablaba antes. Que lo hagan los grupos que me gustan especialmente, y de repente se pagan una publicidad, pues me deprime. Es como.... Joder, no. No lo hagas. No. No lo hagas, por favor. Eras guay ya. Con pocas visualizaciones me gustaba más. Pero cuando lo hacen los amigos, es más doloroso. Sabes de sus idas y venidas. Sabes de que pie cojean. Sabes la cantidad de likes que tienen. Sabes en lo que se mueven, sus estadísticas. Sus números. Sus medias. Lo vas viendo y es como... Joder, págate un bolo y así inviertes en eso. No tocas nada. No das un concierto desde hace años y te pagas anuncios. Joder, qué mierda no? Es jodido o muy jodido lo de tocar en vivo pero coño. Ponte. O paga la sala. Es lo que hay. O busca en bares o en pueblos más pequeños que pagan. Deberçia hacer una lista de cosas que hacer antes de pagar publicidad en facebook. 1.- Compra mejores cables (Paco Loco nos dio la lata con eso y lleva razón) 2.- Compra mejores pedales 3,- Pagate unas clases de canto (Debería ser el numero 1 de la luista porque todos los vocalistas de los grupos amateurs somos penosos) 4.- Pagale a un diseñador que te haga un cartel guapo 5.- saca copias físicas de ese cartel (que exista, que sea REAL) 6.- compra mejores instumentos 7.- invierte en gasolina para una gira 8.- toca en directo y arriesga si es necesario... 9.- Ve a estudios guapos y págale a productores que molen 10.- haz publicidad tradicional pero mejor no gastes nada en publicidad y limitate a tocar en directo mucho mucho mucho porque es siempre la mejor publicidad.... Y podría seguir....
 pero paso. Con diez va bien. Porque ademas estoy super deprimido y me está entrando un frio que no veas por los costados. Un repeluco muy chungo por los riñones. Hala, me voy a abrigar....
Mantita. Y otro día termino la entrada de 10 cosas en las que gastar tus euros
Antes de poner de publi de tu grupo en FB
Hala... No hagais el tonti... Amiguis.

sábado, 4 de noviembre de 2017

Por qué esto y no lo otro

Hoy llueve. Me desperté a las ocho y media. Estoy dentro del coche esperando. Es sábado. Cae de un modo constante. No demasiado pero sin amago de parar. Los párpados casi ni se sostienen. Están en segunda fila. Como todos. Permanente vigilia. Vigilantes con el cielo gris. Como yo. Chasquidos monótonos. Las gotas suenan en el techo metálico de única música. No soporto el silencio. Guerra al silencio. Guerra a la mala hierba. Guerra a la lluvia en fin de semana. Nivel de bateria bajo me dice el movil. Anda que no, pienso yo. Bajo todo. Bajo mínimos, me gustaría responderle. Bajo esto hay un mar. Se nos derrama el cielo. El click click de los cuatro intermitentes se mezcla a ritmo de maquina de coser con el agua. Se van cosiendo los charcos a ribetes por las aceras. Me concentro en el patrón que siguen los chorreos de los canalones como si fueran coordinadas voces de cantata.  El tamborileo pasa a ser redoble y un coche pasa en la curva y salpica como si fueran los platillos. Miro en el asfalto mojado cómo lentamente se embalsa en crescendo y hay más ondas y pequeñas mareas y más puntitos como notas de pentagrama. Aprieta. Me dice el cerebro: Aprieta. Me manda mensajes de fuerza. En la luna del coche se hace un espejo de gotas. Pasan veinte segundos y se convierte en cortina. Tengo quitado el contacto. Los intermitentes avisan que estoy parado. Hago tiempo. Es sábado. Las nueve y siete minutos. Llueve en sábado y es un agua que moja más. Nueve y siete y veinte segundos. Espero. Hago tiempo. He hecho una foto del cristal mojado. La pondré más abajo. Hago tiempo. Una foto del charco. Hago tiempo. Bateria baja. Escribir en el blog. Hacer tiempo. Esperar. No sé el qué. Hago tiempo. Qué expresión más tonta. Justo lo contrario de lo que suelo hacer aqui. Que es deshacerlo. El tiempo es un concepto engañoso. Ahora espero. El tiempo pasa lento inexorablemente pero es poco en su conjunto.


¿Por qué se llaman parabrisas y no paralluvias?
La brisa siempre me pareció inasible. Concepto leve. Muy interpretable. Volátil. Poético. Según lo friolero o de dónde seas es una cosa u otra. Parabrisas, no. Es lluvia en realidad. Las palabras importan. Las palabras pesan. No es eso. Opino que brisa es una palabra bonita. Incluso lluvia no está mal. Hay algo íntriseco a la construcción de silabas. La dignidad de los fonemas. Un aire dentro de las palabras. Una virtud. Una música. Eso creo. Se llama a las cosas de forma distinta a lo que son. Por lo que sea. Tengo marcada a fuego en la mente una frase de mi padre siendo yo muy tierno infante y ya con precoces inclinaciones literarias, tan insulsas o ingenuas como las de ahora, y me resisto todavia a atender ese consejo que me resulta tan inolvidable como molesto pero ahí sigue. Ya lo he escrito aqui mil veces. Siempre hablo de lo mismo. Mierda recurrente. Molaria decir que es coherencia pero es que soy un pesado. Siempre estoy con lo mismo. Los consejos paternales ya han aparecido. Creo. Soy un ajo. Me repito. Ajo frito. Consejitos literarios. Válgame. Si quieres aprender a escribir, tienes que aprender a describir. Ojo. Lo reitero. Joder. Vaya con el consejito. Si quieres aprender a escribir, tienes que aprender a describir. Repítelo silenciosamente en tu mente. Una vez. Otra vez. Una más. Eso eso. Interiorízalo. Vaya. Describir ya  me parecía una mierda. Después de eso fue un islote de caca. Lo mismo no me la dijo así o no me acuerdo bien. La memoria es muy puta. Olvida sin remedio. Pero eso se me quedó. Se quedan mierdas. Vete a saber por qué. Leyendas urbanas íntimas. De cada acerbo. Y describir era decir cómo era todo. Dar detalles. Los oportunos y no otros. Describir era encontrar el equilibrio de detalles. El equilibrio en el conjunto. Eso opino ahora. Antes me parecia solo aburrido. Nada que ver con mi vocacion de entonces. O mis expectativas. Fueran las que que fueran. No las recuerdo. Obvio. Describir era una mierda. Describir era caca. Describir cosas. Qué rollo. Qué coñazo. Describir cómo eran las cosas, cómo eran los muebles, cómo era la ropa, cómo eran las paredes, cómo eran las cortinas, etc etc etc interminables etc y escribir si entraba luz de la tarde o era matutina o luminosa y cálida o si apenas se veía y si en esa penumbra se dejaban entrever sombras y cómo eran de oscuras o no  y las particularidades del resto de decoración o mobiliario, los objetos, la naturaleza de los objetos y cómo se comportaban los personajes en relación a los objetos aunque, claro, esto es añadido con el tiempo, lo sé ahora. De niño me parecía aburrido y ya está. Lo de describir no lo veía yo como algo bueno, la verdad. Es una mierda, sigo opinando lo mismo. Dan igual los objetos. Lo mismo es un bug del cerebro. Que me dice que apriete. Nos acordamos de estupideces. Los cerebros son unos cobrdes. Se nos quedan grabadas tonterias. Se nos olvidan las noches gloriosas. Le tengo mania a describir y a la frasecita de marras. Siendo yo un crio no pensaba en eso. Me molaban los cuentos.Como a todos los niños, supongo. Y sobre todo los que hacian reir. Los cuentos de risa. Quiza esas fueran mis aspiraciones.  Algo divertido. Describir no lo parecía. Lo odio igual. Desde entonces. Nunca se me ha dado bien. Entonces ya me parecia horrible. Describir es como hacer fotos.Que tampoco es algo que me prive demasiado. O es mas bien como revelarlas. Mucho mas aburrido. Describir es un cuarto de revelado. Y tienes que tener mano con el liquido fijador. Siempre he sentido que mis descripciones están un poco movidas. Fotos movidas. Describir es que el momento esté centrado. O me salen un poco borrosas. Siempre me han gustado las fotos borrosas. Las descripciones borrosas son caca. Son un cristal mojado lleno de agua. Son un parabrisas que se inunda. Descripciones que son borrones. Que son fotos que no valen. Fotos que no se ven ni se verán. Como un carrete velado. Muchos años de mi vida están así. Como un carrete velado. Esa posibilidad ya no existe hoy en día. Que todas desaparezcan de un golpe. Puede desaparecer la carpeta. La tarjeta de memoria. Emsobrecerse de negro porque se abrió la cámara antes de tiempo. Ahora hay carretes antguo que tienen algun defecto pero le da un toque vintage al revelado y los

¿Por qué en las clases de dibujo lo que se hacía era calcar y no dibujar? Recuerdo que nos teníamos que comprar las láminas de Emilio Freixas. Las googlearé para vosotros: http://bit.ly/2zdjWZW Y teniamos que entregar dos o tres libres de elegir. Lo he contado mil veces tambien. Tengo la sensación. El deja vu. Que soy un pesado, vaya. Y a mi me parecia un rollo tener que copiarlos. Clases de copia. Clases de copiar eso era para mí. Un martirio. Un plagio obligado.
Resultado de imagen de laminas emilio freixas
Artistico. Lecciones. De qué. Por qué. Era calcar. Era contra el cristal. Permitían el papel de calco, joder. Cómo va a ser eso. Menudo Engaño. Qué mierda. Lo pasaba realmente mal. Las odiaba. Era algo mal. Nos hacian hacer el mal. Y era como algo sin importancia. Una materia menor. Y nos trataban como a idiotas. Eso pensaba. Entonces. De niño. De chaveilla. Un enano. Gafotas y contrariado. Nos obligaban a copiarlos. Si era... Un suponer: Un bodegón. O un campo. Una casa en un bosque. Pues no. No podías inspirarte y cambiar la manzana por un melocotón o si era un paisaje, pues no podías cambiar de sitio los árboles. Tenías que copiar la lámina. Tal cual. Sombras. Cada detalle. Cada destello: Cada reflejo. Vaya mierda. Todo. No sé si hablo de sexto de EGB o quinto o séptimo o si es plan antiguo o si os haréis a la idea pero rondaría sobre los diez años quizá ocho o quizá nueve pero no sé, éramos aún pequeños para esas mierdas. Clase de copiar. Al carboncillo. La clase de dibujo era clase de copia de dibujos. Eso opinaba yo. Y la profesora me califica mal si cambiaba los árboles de sitio aunque el dibujo quedase más bonito apaisado que en vertical, un suponer. Y los arboles tenían también cambiadas sus sombras y partes oscuras, ojo. Era un cambio, ok. Pero un cambio bien hecho. Pues no. Era un pequeño cambio en la composición, de acuerdo. Pero que no afectaba al acabado, ojo. Si acaso lo mejoraba.  Pues no. No. No. Y no. La tipa no admitía cambios. No era dibujo. Joder, maldita profesora. No recuerdo el nombre. A mi me encantaba dibujar y odiaba aquello. Eso no era clases de nada. Porque no nos daba ningún truco ni nos explicaba cómo hacerlo. al final era calcar. Se trataba de eso.LA peña ponía la lámina en la ventana y la dibujaba encima en un folio. Era como calcar un dibujo. Y ya. Buena nota. Bien copiado. Buena nota. Describir se parecía  a eso. No es escribir que es como dibujar. Es más parecido a calcar. Odio calcar. En el colegio la clase de dibujo era clase de calcar. La profesora era un calco de profesora. Odiaba a la profesora por eso. No le veia merito. En la infancia están gran parte de las estupideces y manias. Es como un trastero del que puedes sacar muchas mierdas con las jugar. Calcar es un asco o siempre me lo ha parecido. Escribir es como cambiar de sitio los arboles. Qué coño. Es como plantar árboles nuevos. Pintar me molaba y me mola. Mogollón. Simplemente pintar y pasar un buen rato. Con los colores. Con todo tirado por el suelo. Con un momentáneo desorden sin un objetivo fijo. Como crear un jardin. Como pintarlo los árboles rojos si quieres. Esa posibilidad. Arboles rojos sin ningun motivo. Odio describir. Que es pararse en cada petalo, en cada pistilo, en cada flor...  Y que cada color sea el correcto. Marmoleo. Purpura. Rosa pastel. Yo que sé. Odio describir. Odio calcar. Odio y siempre odiaré a Emilio Freixas y a sus láminas. Odio a mi profesora de dibujo que era en realidad profesora de copiar dibujos. Y mi poca diligencia en acatar normas también me resulta odiosa. En las descripciones me pierdo. Siempre he  pensado que no termino de hacerlo del todo bien por lo describir. Ni lo de copiar. Que no termino de aceptar que los árboles no se pueden mover. Que no se valora la inventiva. Que es la fotocopia hecha a mano lo que puntua. Esto pasa en muchas facetas de la vida. El odio es una mierda. A veces decimos odio noseque y no es para tanto. Odio el brocoli. Y lo mismo con un buen gratinado y una buena bechamel, te lo comes y te relames los bigotes. O sea. Lo del odio es siempre con matices. En esto de expresarse super hiperbolicamente en filias y fobias para caracterizarse en esos tiempos de fotocopia tras fotocopia, pues es todo sublime siendo una gilipollez. Elevar la anecdota a cosa epica pues nos vuelve a todos gilipollas es mi teoria. Mañana tendre otra. Pero creo que se banaliza lo del odio. Pero en el caso de las descripciones no es exagerado. Es exactamente eso. Odio. Odio a la descripcion. Odio a la verisimilitud. Odio a la veracidad. Y profundo y sincero odio a la copia. Que se puede aplicar desde a Freixas y sus torturas de sombreados, a los grupos tributo o de versiones. Stop copia. Stop copiar. Stop calcar en las ventanas. Para esto, lo del odio es correcto y apropiado. Incluso se queda corto. Uno tiene que ajustar la palabra al sentimiento. se trata mas de eso,, opino yo. Ritmo. Musica. Desorden. Arboles rojos sin ningun motivo. En el blog puedo. Porque es un blog personal y oye. Aqui paz y despues gloria. Odio la verisimilitud. Siempre que no sean personas ni colectivos, pues el odio no es tan dañino. El brocoli no sufre. Lo de escrbri ya es como un empeño tonto. Como de niño chico. A las pruebas me remito. Y ni siquiera considero aceptable lo que releeo. Me pasa con las canciones. Con las voces. La voz grabada parece una mierda a uno. Todos nos escuchamos huecos a nosostros mismos o fallidos. Hay un tono dentro del cráneo y otro fuera. Es parecido a lo de escribir, conjuntar esas armonías. A todos se nos hace rara nuestra voz grabada. A todos se nos hace raro nuestro relato escrito. Nuestra historia. Lo cuento mal. Y mira que cuento nada. Pero siempre siento que me explico poco o regularr. Pintar tampoco. No se me da mal pero solo lo hago cuando me aburro mucho. Copiar no. Simplemente pinto. Nada realmente en ninguna parcela. No me considero con maña para nada. El bricolage cada vez me gusta mas pero se me da fatal. Para la música, regular. Voy mejorando. Pero soy una tapia. Ni cocinar. No se me da mal pero tampoco hago nada especial. Todo con mucha salsa. Al caso. Describir. Odioso. Con todo y con eso, no he dejado de ponerme a ello. Con descripciones las justas. Con poco que decir. Contando nada. Con más mala fortuna y poca paciencia que otra cosa. A ver qué pasa. Por ponerme. Por hacerlo y ya está.. Es como colorear o intentarlo hasta en los malos ratos. El caso es gastar boligrafo, me decía mi madre... Gastar boligrafo... De eso creo haber escrito aquí también o quizá no. A veces lo piensas que lo vas a escribir y no lo haces, o viceversa. Gastar tinta. Gastar tiempo. O gastar blog. O entradas de blog. O los ojos en la pantalla. O la paciencia del lector. O lo que sea. Hacer gasto. El caso es hacer gasto. Que quede cuenta. Que deje huella. Que sea algo. Pero sin descripciones que me toca los cojones.

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Nada existe y eso que te quitasLa existencia misma de las cosas es un tema interesante que se puede aplicar a la música en estos tiempos de visualizaciones, visitas o escuchas. Ahora que nada existe. Eso que te quitas. Lo de las migaciones a Vevo tengo que ponerlo en otra entrada. A mi todo me parece una mierda empezando por el instagram usado como plataforma publicitaria. Y la publicidad en general ya deberia estar tecnificada para no meter tanto endorsement o como se llame y tirar tanto de pesca de arrastre. Si todo es segmentable la publicidad debería ser opcional en función de los intereses y cero invasiva. Opino yo que no tengo ni tostador. Y que estoy con dos cafés en el cuerpo. Y una tormenta que ha madrugado conmigo. Quiero hacer un ensayo que verse sobre la materia.. De eso no sé si os hablado. Tostada de tomate. Materia. Entrada de blog que escribe sin haber comido Con el grupo cuando íbamos dos y en acústico todo era mas chamánico. La musica importaba mas en el bramido que en la afinacion. Y me parecia muy bien. Como atávico. Como situacionista. Como un rito. Y casi siempre un rito ridiculo. Porque gran parte de los cliches de los conciertos son un poco tontos, opino. Era divertido. Baja. Bateria baja. Pues claro. Dejo el movil. Me cambio al ordenador. El medio es el mensaje. Uno se explaya de otra forma. La pantalla tactil es otra cosa. me hace tocar el peñazo. Que salga de mis yemas la mataca. Es otra cosa.

viernes, 3 de noviembre de 2017

Canelita on the window


Artista sin camino

Pues ayer quedé con mi amigo Dani y estuvimos charlando sobre mil cosas pero entre ellas me contó que estaba leyendo un libro que le habian recomendado para desbloquear la creatividad y que le estaba encantado. Y consiguió llamar mi atención.
Una de las estrategias es escribir tres folios diarios y claro eso me hizo pensar en esto, en mi blog porque tienes que escribir sin tener nada pensado, a las bravas con lo que se te ocurra en el momento y ojo, es un método muy reconocido y tal. Eso hace que el primer folio sea un poco terrenal pues he desayunado un café. pues casi no me queda leche pues hay un cartón de leche de soja pues lo mismo prueba el un cafe con soja y llego al cafoja: cafoja. El proceso es un poco así, por lo que me contó con las dos cañas. Luego fuimos a un concierto pero no vimos casi nada. Fue una noche un poco rara. Yo llevaba un día criminal. Llevo un mes criminal. Mi amigo Dani, el otro, que está en Alemania currando también me escribió ayer preguntándome qué tal. Con el chat me cuesta ponerme al día. Me va mejor una nota de voz. Al final este blog era para desbloquear la creatividad. Tengo dos amigos Danis. Uno en Alemania y el otro, el de la creatividad. Uno era nuestro técnico con el grupo y el otro se ha metido ahora de guitarrista. Ayer quedamos para hablar del grupo. O bueno, por ponernos un poco al día. Y planear futuras acciones. NO sacamos nada en claro, a decir verdad. Pero me moló lo del desbloqueo de la creatividad. Al parecer el libro es como un curso. Te manda deberes. Lo de escribir los tres folios es una de las tareas pero hay más. Mola. La idea es chula porque analiza todo el proceso de la creación. Los de alrededor. Lo del amor. Lo de la vida normal. Lo de fregar los cacharros. Lo de vivir normal. Que es super complicado y aun más lidiarlo con la creatividad, sea lo que sea a lo que te dediques. Es chulo lo que me contaba y suelo desconfiar de los métodos y de los cursos de ese tipo. El rollo de la escritura creativa. Oxímoron.
No hay nada que no sea creativo. Aunque no lo parezca. Hacer una ensaladilla de patata. Sin ir más lejos. Ponerle piña. No sé. Simplemente hacerlo. Escribir es cocinar con ingredientes invisibles. Creo que es complicado hacer porque hay mil pasos intermedios. En lo que se piensa y lo que te pones. Y sube el bizcocho de todo lo que has amasado. Tiene vida propia de repente. Es como sembrar en la selva. Y luego todo lo que te rodea. Cada selva de cada día. Cada semilla que no vemos. Cada camino que se llena de arena. La gente que no volviste a ver. Lo que simplemente ocurre. Y lo que no. Lo que nunca va a pasar. Y nos queda lejos. Que no depende de tí. Con esto de los grupos lo pienso mucho porque son varias voluntades que tienen que ir a una. Es una forma de encauzar lo que fluye. Es una forma un poco penca de definirlo. Pero bueno. Es mi blog. Amigos, qué bien me sentó ayer eso de los tres folios diarios. Joder, lo llevo haciendo ya un tiempo. Sin darme cuenta y ojo, oprobio, que en público debe ser aún peor. En vivo.
Y claro, ya hablando de lo que rodea al hecho creativo... Principalmente el dinero. Es el tema. Lo que determina el nivel de implicación. Me decía Dani que había un capítulo sobre el dinero. El dinero. Es un tema muy interesante. A veces os he hablado por aquí de lo del decrecimiento. Eso lo uniría a lo de El camino del artista. El título es ese y me dijo el nombre de la autora pero no lo recuerdo. No he querido buscar. Lo del dinero da para mucho. Cómo gastarlo, cómo ganarlo, cómo reinvertirlo... Y vivir. Comer tres veces. Etc. También me decía que está como muy en lo cósmico Que a decir verdad, Dani, no sé exactamente a qué se refiere al decir lo cósmico, más o menos lo pillo pero regular. El libro habla mucho de conexiones. Con eso me perdí un poco. Yo ya llevo mi paranoia lo mejor que pueda. Que me cuesta. Supongo que es tener en cuenta la paranoia del universo.
Lo que me gustó es que te obliguen a los tres folios diarios como forma de dar rienda suelta a lo que realmente sientes por volumen. Subiéndole el volumen a tus pensamientos despues de un centenar de líneas y despues de una semana, te expresas con una soltura en el mundo de las ideas, que, no sé, me figuro que tienen que campar a sus anchas los conceptos creativos en los que quieras expresarte, yo le entendí más o menos así y no he querido googlear nada sobre el libro para escribir esto así, un poco sin referencias claras. Luego vi un rato a Victor y hablo de un libro de sueños. De anotarlos. No sé si es durante un mes o una semana. Al parecer te cambia la vida. Rollo escritura automática. El colmo de la irresponsabilidad creativa.
Me llamó la atención una cosa. Para  crear, casi siempre, tienes que estar solo. O no es que sea estrictamente necesario. Pero sí. Necesitas silencio. Necesitas quietud. Necesitas que no suene el teléfno. Da igual que sea modelar barro, pulir piedra o tocar el piano. No puedes estar concentrado mucho tiempo sin que alguien llame a la puerta, al timbre, al telefono o nos manden un correo, una notificación.... Hay mil distracciones. Cuando realmente estás haciendo algo creativo e intenso, como, pongo por ejemplo, grabar un disco pues te tienes que abstraer doce horas al día y solo escuchar notas o acordes o golpeos o rasgeos o zumbidos o lo que sea y la voz del que te graba que dice: repite. Otra. Una más. Ahora igual, pero bien. Otra, y ya. Una más suave para tenerla de fondo. Bien, perfecto. Y no se puede atender al teléfono. Ni mensajes. Ni nada. Pura responsabilidad creativa en el aislamiento y la concentación. Y concretación. Que lo he escrito por error pero me vale. Lo de grabar es muy claro. Tienes que ir a lo concreto porque lo que se queda ahí, es lo concreto. Al grano. Se graba el grano. Hay que concretar. El mundo de las ideas mola pero mola más llevar las ideas a otros mundos.
Siempre hay un mensaje de un colega que escribe para salvarte. Mi colega Sergio me dice de echar una caña. Me pilla liado. A lo que iba. Es eso. Es dificil aislarse. Es dificil consagrarse a algo. Como en un monasterio. Y vida piadosa. Y ponerse. A tocar. A escribir. A leer. Leer es muy importante y escuchar música es muy importante. Como un religioso. Ponerse a oir discos religiosamente y quza buscar trucos para obligarse. Dedicarse a grabar música es como rezar. No rezar a lo flasillo. Dialogar realmente con Dios, me refiero. Dios es una imagen metafórica. Me dijo Dani ayer que en el libro mencionaban mucho a Dios. Supongo que a eso se refería con lo cósmico. El universo, etc. En fin se acaba de romper una tubería. Jódete. Eso es Dios o a eso es a lo que me vengo a referir. De repente, se jode la cosa. Estoy sin agua. Pues cosas así. No puedes concentrarte mucho con cosas así. Y siempre se están rompiendo cosas. Es como ese Demiurgo pero al reves, que deshace. Que afloja tornillos. Que estropea contactos... Al paso del tempo solo se le detiene con soldaduras. Si necesita ser soldado, ya es cosa seria. Ya es una disrupción importante. Cuando empecé a escribir esto, tenía menos problemas y la comida no está hecha. Ocupaciones mundanas. Preocupaciones mundanales. El gatito quiere comida húmeda. Se harta de pienso. Como nosotros. A veces. Me harto de lo que pienso. No doy con el mechero. Se lo comen los sillones. Era esto. Lo de los tres folios. Se explaya uno. Y pasan cosas, oye. Que porque escribas o toques, no se para el mundo. Necesitas parar tú, eso sí. Pero las tuberias siguen agujereandose. El tiempo sigue devorando con sus dientecillos de rata. Las raíces de los pinos de la valla tiran pellizcos de monja. Se corta el chorro. El fontanero ya está avisado. Le temo a la reparación. En fin, el arte de ir arreglando lo que se rompe. En fin. Tengo que mandarle el audio a Dani. El de Alemania. Se ha metido en un duo de perfomance o algo. NO me he enterado. En un audio asi de un par de minutos se resume todo. Es como lo de los tres folios pero de viva voz y con más carrerilla. Amor. Bien. Salud. Bien. Dinero. Regular. El grupo. Pues ahí va. Ensayo una vez al mes. Estamos pelín parados. No sé si cogiendo fuerzas o buscandolas. O sin fuerzas temporalmente. Falta un poco de perspectiva, Algun fecha. Algun cartel. Algo curioso. Algo que promocione... Dani insiste en ensayar. Me parece bien. Hacer versiones nuevas de las viejas canciones. Me parece bien. Le está sentando genial lo del libro y los tres folios diarios. Bueno, en fin. Todo esto ha sido para escribir que me veo como artista sin camino que suena fatal pero creo que es lo mejor, ser camino, olvidar lo de artista. Ser el camino.
La verdad.
Y la vida.
Al final es algo espiritual. Lo que nos metieron desde chicos. Rezos. Salmos etc
Padre nuestros. Aves marías. Etc
Ser caminos.
Verdades. Vidas.
Canales.
Y puertos.
En fin lo de contar los tres folios en más difícil en el rollo blog. De cuantificar. De darle la vuelta a la hoja. Llegar al final del folio. Esa sensación de subir un repecho. De llevar una hora echada del camino de senderismo. Media excursión hecha con un folio y medio. Es una buena forma de ir subiendo. Pillar altura. No estar pegado a la terrenal. Ni a lo subterráneo. Espero que el fontanero venga esta tarde y no me arruine el presupuesto de los próximos tres meses. O cuatro. Joder. Ahora he tenido que abrir el grifo. Se pierde en estos momentos. No sé si poner macetas donde está el corte. Que chupe. Veremos.
Mal día para presupuestar fontanería el viernes. Veremos a ver.
El presupuesto. La verdad.
El agua que corre y se pierde.
La merma. La vida.
Leer blogs personales que ponen gilipolleces: el camino. Haz algo, leñe. Antes de que se te joda el agua caliente.

El fontanero se llama Dani. También.
Mira tú qué cosas.

jueves, 2 de noviembre de 2017

The Cure - Jumping Someone Else's Train (Original Video)

lavadoras que me esperan

siempre que discuto con mis novias habia una lavadora puesta y por alguna razon chunga del karma que desconozco, al final me toca a mi tenderla o recogerla despues de los sabes que te digo? qué adios, los cogo la puerta y me voy, los ahí te quedas a ver quién te aguanta, los nunca me has querido y nunca me querrás, los eres un egoista y siempre piensas en tí mismo y al acabarse la retahila de reproches, los gritos, las voces etc pues tengo la lavadora, la lavadora seguia ahi.
cuando despertó, la lavadora seguía ahí.
La bronca es el sueño, en este ejemplo. Y yo el dinosaurio.
Y ahí se me queda, como testigo inmóvil de nuestra doméstica tragedia y como un mudo actor que no participar sino dando gravedad al paso del tiempo, sobre todo si hay ropa dentro y está cogiendo olor.
La lavadora ahí se queda.
Aquí. Mientras tragas saliva o te muerdes los dientes con lo que no has dicho o lo que has dicho y te reconcome pues toca apilar bragas, recoger sujetadores o lo que sea y quitarle las pinzas y me jode infinito, claro
La broma del destino
siempre que discuto hay algo pendiente que suelen ser lavadoras, ok pero sirve para cualquier cosa: fregadero cochambroso, baño impracticable o dormitorio ruinoso... pero la lavadora reune más elementos, es como una metáfora de todo lo que está en el aire, para que se seque y lo que se queda húmedo o las manchas que no salen
Las peleas suelen ser por eso, y es totalmente metafórico, por las manchas que no salen.
La pelea es el capítulo uno, la lavadora es el dos. Quiza sea una metafora que centrifugamos, que la líamos y eso. O que las tareas siguen aunque la casa, no. No. Bueno, no. Se me ha ido. No lo veo. No es eso. De eso no es metáfora de nada. A la mierda, joder. Que nos mandamos a la mierda. Y la casa sigue aquí, siempre. Llena de sus tareas sin hacer. Con su mierda propia. Es un choque de mierdas.
Las peleas siempre son choques de mierdas. Es mi caso, siniestro totales. No solo novias. He chocado mi mierda con hermanos, amigos, compañeros que a su vez también me colisionaron con su propio excremento y a veces es por accidente pero otras, es como los coches de choque. Es como los coches de choque de mierda. Y nos damos de frente. Contravolanteando. Cogiendo carrerilla para que la mierda impacte más de lleno. Supongo que le pasará a todo el mundo. Espero que sí. Que todos se hayan sentido alguna vez en una pista de coches de choque de mierda y se hayan chocado con otros. Y tal. Me considero muy pacifico lo que no quita que odie poner lavadoras y tenderlas.
Me he salido y he hecho una intentona pero nada.
Esta seca pero húmeda. No como una toalla húmeda sino como de frio. Un frio mojado. Pero está seca. Ayer puse tres lavadoras. Me come la casa. Y me come con quien esté dentro. Me siento culpable en todas las partes de la ecuacion pero bueno, no es queja. Me va y ya. Me va el sufrir, creo. No me va tender. Unas cosas van y otras no van. Eso pienso siempre con las peleas o eso pensaba. Si nos peleamos, pues a la mierda. Es como pillar la parte por el todo. Si hay pelea, no hay amor. Si me dices mierdas, no me quieres. Etc.
Con el tiempo he matizado posiciones.
No es que sea yo cabezón por que sí y me aferre a lo fantasioso teen en mi proceder que en algo, pues peterpanearé como cualquiera pero trato de ser fiel a mis ideas, a mis máximas pero sobre todo a mis mínimas. Y joder, sirve. Ponerse límites y decir: Esto sí. Esto no. Esto tampoco.. Lo otro pues no. Y todo es que no. Que no es que esté mal. Pero al final hay que buscar esa convergencia entre los resultados que arroja el mundo real y tu cálculo de probabilidades sin dejar de pensar en lo que uno tenía por verdad absoluta por más que fueran absolutas gilipolleces. Manchas que no salen. Hay que tener la fé de las manchas que no salen. Hay que acentuar fé. Una y mil veces.
Es todo una mierda amigos qué queréis que os diga, un valle de lágrimas que no es verde sino oscuro, y a veces negro, podrido. Un pedregal de lágrimas al que llaman valle para jodernos, porque no es chaporreillo de lágrimas, es un puto torrente de lágrimas sobre un pedregal. Eso es lo que es. Y con lavadoras esperándote, amigos. Lavadoras al acecho. Bragas y sujetadores con los que no se puede seguir discutiendo.