domingo, 22 de septiembre de 2019

aportar algo

Bueno, chavalotas y chaveillas, hace tiempo que no os cuento mis mierdas, dadme las gracias por dejaros tranquilos unas semanas porque vuelvo a dar la brasa como de costumbre y dando con todo, porque estoy haciendo reformas en casa, una cosa seria, es el nuevo local de ensayo, del grupo y tengo una bateria en el salón, es un sueño cumplido, por ahora hemos hecho dos ensayos, íbamos a montarlo en el sótano, va a ir todo ahí pero con la tormenta de la semana pasada pues se inundó, una movida muy seria, pero me sirvió para sacarlo todo, esto no sé si lo he contado en otra entrada que tenía en borrador, y es que a veces las dejo a medias, no sé ni cuántas cosas tengo en borrador y a medias, o no llega, uno lo intenta, qué quieres pero lo voy haciendo, estar en borrador ya es estar, ahora tengo la casa en borrador, hay goteras, la tormenta me ha jodido bien y dos días, dos días de la misma semana, la primera vez con la fregona llené un cubo, la segunda vez había el doble de agua, fue una putada, el techo está jodido, faltan tejas, se filtra, y el techo de dos habitaciones tiene la piel mudada del yeso, una movida, vamos a poner un canalón a ver qué pasa, para el verano que viene quiero tener la piscina operativa, veremos a ver, es difícil, esta semana había una piscina en el sótano, hablo mucho y hago poco, eso es verdad, siempre lo ha sido pero voy haciendo, el jardín está bonito, me siento orgulloso de las plantas que pillo de la calle y sobreviven, es como si las salvase, mi madre me pasa también sus tiestos chamuscados y resucitan en mi arriate, para mí es medio mágico, bonito de verdad y paso el rato observando los tallos como si fuera capaz de verlos crecer, pierdo el tiempo en definitiva, pero lo hago de un modo entrañable o eso me creo, o lo quiero pensar, para no desesperarme y liarme a bocados con las margaritas, tengo estrategias para que no me coma la ansiedad y no comerme yo ninguna pobre plantica, que no tienen culpa de nada, la música me sirve, siempre me ha servido, estoy ensayando en serio con la guitarra, tratando de aprender, de controlar un poco más, no tengo ni puta idea, es la verdad, de música digo, de escalas y todo eso, siempre me ha gustado poco eso, es como las matemáticas, nunca fueron mi fuerte, lo mío era las letras y también lo son en las canciones, no sé hasta qué punto esto tiene un mínimo de importancia, da todo igual creo, es solo confianza, creo y tener confianza en una ligadura de acordes y que salga de las entrañas, esto suena a mierda de autoayuda pero es lo que creo, confianza en el sentimiento, lo hablaba con Dani que tendria que existir un medidor de confianza en la melodía, lo que hace que unas canciones sigan vigentes en el repertorio y otras se olviden para siempre, no me explico ni una mierda de bien pero confio al cien por cien en vosotros como lectores expertos, todo me parece bien, es poesía también lo de las letras y no es del todo matemática la relación, no para mí, y entre las margaritas, las cafeteras y esto que cuento pues pierdo el tiempo de una manera entrañable opino, y sigo pensando en esto y bebo café con mucha azúcar mirando crecer a las plantas, y lo escribo para que me cunda aún menos, pero todo esto desemboca en algo, no creáis que soy vago pero no gilipollas o no del todo, porque es la idea que cristaliza lo que vale, da igual una frase, o un verso en los dos acordes ligados y listo, hay una canción, es así de fácil y si no pasa, es que no ha pasado, y hay que estar en que pase, hay que esperar en la esquina y tener mechero por si te piden fuego, es eso, y es en las que estoy, canciones nuevas, sentimientos nuevos, nuevos ligues, nuevas ligaduras de notas, aprender algo, cojones, tratar de aportar algo, eso fue un exabrupto de mi antigua pareja antes de grabar el último disco: "¡Trata de aportar algo!"


Qué cojones es aportar. Que me lo diga alguien. Aportar. El qué. Será mi puto problema de no entender del todo bien algunas palabras. Humilde, entre ellas. Aportar. Que es un eufemismo, está claro. De qué coño hablas de aportar. No trato. Hago y la cago. Aporto, pues lo que puedo, Casi siempre mierda. O cagadas. Pero aportadas están. no? Yo qué sé. Aportar a quién. Aportar qué... La vida no es un puto convenio regulador. Ni dilucidar aportes. Vamos, creo yo. O la mía no lo es. Eso seguro. Y ella o quién sea que diga lo que quiera. Uno lo intenta y hay mil como yo intentando y mil que estamos en lo mismo y hay dos mil que son mejores. Ser original es la clave creo. No tratar de ser otra cosa que no seas. No tratar. Eso siempre ha sido mi rollo: No trato. No hay trato. Ser un poco intratable. Y un poco gilipollas, cabe añadir. El puto secreto de Enrique Octavo, que es como se llama mi grupito por cierto, desde los comienzos es eso. Ser un gilipollas. Pero bien. Todo bien las cagadas y las gilipolleces que hasta aquí nos trajeron. Eso es la vida, corazones, es eso. Ni aportar ni ostias. Se trata de eso y no de tratar. No tratar. Nunca tratar. No hay trato que valga. Cero trato. Cero trata. Y a tomar por culo. Y aporta o no aportes pero hazlo, cojones. Que me mosquea... El rollo ese de por encima, ¿sabes? Solo porque haces canciones. Solo por eso. Joder, tan malas no son. O sí pero y qué... Acaso es por eso. El imperio del silencio. El puto karma. Tanto daño no se hace al mundo, aportes o no aportes o no sé qué coño. Pero vaya. Que todo bien. Súper curadito de todo estoy. Sin la condicional. Sin traba ni lastre. Hecho un roble. Pues claro. Y ya ves, el buen rollazo que manejo. En serio. En todo caso, ahora estoy super animado, o menos depresivo que de costumbre para ser más fiel a la verdad. Y por ser fiel a algo. Y buscando. Pensando mucho en los próximos pasos. Cómo o dónde darlos. Y cómo de largos. Es complicado. Tomar decisiones. Ya sabes, eso es lo más difícil. Por ahora yo he dicho siempre sí a todo. Sí a todo. Y no hay trato. No hay trato pero sí. Es difícil combinación. Y todo lo he hecho yo mismo. Que quizá no sea la mejor manera de hacer las cosas sobre todo si yo mismo soy yo. Fiel a esa idea. Fiel a una pila de cosas en verdad. Que me tiro el rollo de machito gallito pero sabéis que soy un pringadillo romántico que cree que se puede cambiar el mundo. De hecho, cambia a diario. A peor. Ellos no lo ven. Nadie lo ve. Tienes los ojos tapados por sus propias necesidades. Como todos. Con eso que llevan los caballos para no mirar a los lados. Y marcando al trote. Todos al trote. Al trote y al frote. A troche y moche. Y al tún tún. Al trán trán y encima, quejas de que nos va mal. Peor te tenía que ir, por tanto quejarte. Querrás que te vaya bien encima, como me decía el Toni. Encima querrás que te vaya bien haciendo lo que haces. Hacer lo que hago, esa es la clave. Aportar algo. Aportar mi puta mierda. Redimensionar el concepto aporte. Redimensionar el concepto puta mierda. Pero es lo que es. Es sumar. Ser más. Eso está claro. Tenemos que ser más, y aportar algo. Le doy la razón a ella, pobrecita. Por formar equipo. Por tener varios brazos que levanten la cosa cuando decaiga. Porque cuatro ojos u ocho ven más que dos e hipermétropes, como es el caso. Que veo menos que Pepe Leches. Pero bueno. Cagada tras cagada, hecho está. Eso es lo importante. Hacer. Mal y tarde. Sí. Pero hecho. Es algo. Eso espero. No hay trato, de todos modos. Hacer y ya está. Que no aporta, pues sin que aporte. Siempre para delante como los que tiran de la carroza. Lo de siempre. Lo que siempre he hecho. Y en lo que estaba. Antes de conocerla. O en lo que estoy. Después de no haberla querido conocer. Aportando, siempre.


Que sí. Que es en serio. Que va. Que va yendo. Que está siendo. Que es lo que siempre has querido. Que lo que digan los demás, da igual. Que da igual de verdad. Que ella da igual. Que a igual de verdad. Que es verdad al fin. Que soy libre. Que he superado todos los duelos. Todos. Es en serio. Y ahora puedo decir que sí. Que algo habremos aportado. Que da igual lo que aportes mientras lo hagas. Que da igual lo que hagas, mientras lo hagas. Que es. Que estamos siendo. Que estás aquí. Que lo sigues leyendo. Que vuelves. Que lo piensas. Que estamos, de algún modo, juntos. Que no lo parece, pero sí. Que todo tenía sentido. Que era de verdad. Que era por algo. Que florecen las plantas. Que las cosas caen por su propio peso. Que siempre he llevado razón. Que siempre ha sido verdad. Que todo es verdad. Que todo es posible. Que los sueños se cumplen. Que las mierdas de las películas son verdad. Que lo voy a hacer. Que ya lo estoy haciendo. Que es de verdad. El estudio en el sótano. Tener una bateria en casa que siempre ha sido un sueño, tener un estudio en el sótano es la versión completa de la ensoñación. Es el tema. El sueño de las basement tapes. Que se ha inundado, ok. Que estoy jodido, ok. Que es todo una mierda, vale. Que estamos entrando en recesión, ok. Que no hay gobierno. Que no hay temor de dios. Que no hay disciplina ni respeto en las aulas, ok. Que el planeta se va a la mierda, vale. Es verdad. Que sí. Que moriremos y nadie nos recordará. Pero aún estamos dando por culo. Con el blog. Con el jardín. Con la mirada fija en las margaritas. Aún tenemos ojos para ver. Y lo veré, mi estudio. Mi estudio. Y me molaría que fuera todo de madera. A ver. Estoy en bragas en el tema bricolaje para qué te voy a decir otra cosa. No es lo mío o no lo ha sido hasta ahora. Me estoy poniendo. Todo es posible. Los sueños se cumplen. Que se inunde ha sido una bendición... Bravo por la tormenta. Las cosas no pasan por que sí. Acabo de empezar. Eso es verdad. No he hecho nada. Quitando cosas por ahora. Moviendo trastos. Hemos recuperado un aparador con un siglo de edad. Os he escrito otra entrada sobre eso. Y seguiremos. Nuevos retos. Nuevas movidas. Nuevas gilipolleces, sobre todo. Me gustaría grabar a grupos. No. NO tengo ni puta idea de grabar a grupos. O aparentemente no. A nivel técnico. En plan ingeniero, pues no. No es lo mío. Mi plano no es ese. Ni siquiera el de músico. El mío es otro. Otro rollo, otro punto, más ideológico. Más de ideas. Más de Platón. En fin, original o tratar de serlo. Aunque supongo que los grupos solo quieren oir su parte fuerte, y alta. Potente. Y una vez se lo subas a donde le gusta pues adiós muy buenas y a otra cosa. Supongo que será eso lo que pase. Pero vaya que no tengo ni puta idea. Ni de eso, ni de sonido, ni de cables ni de bricolaje, ni de hacer obra, ni nada. Puto bricolaje. Pero bueno, para eso están los tutoriales de Youtube, no? Hace un par de viernes estuve estudiando vídeos de como levantar e insonorizar un tabique. No es nada épico. No es nada dífícil. Hay muchas opciones, claro.
Tampoco es que sea fácil si somos sinceros.
Y nada lo es.
Ni siquiera escribir esto y darle a publicar.
No, lo es. Pero oye, se hace y punto.

Que aporten otros y otras, y aquí paz, sobre todo paz y después gloria.

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