sábado, 23 de abril de 2011

No me gusta Página 2

No me gusta el programa de libros de TVE, Página 2.
Recuerdo a Paul Auster decir en una entrevista, en ese espacio, que no había programas así, de ese tipo, en EE. UU. Ni falta que hace, añado yo.
El Especial Sant Jordi fue un desprópósito de principio a fin.


Para empezar juntan a Rafael Reig, con Julia Navarro y María Dueñas, para hablar de las ferias del Libro. Una breve tertulia en el Palacio de Cristal del Parque del Buen Retiro. Una charla cortada en la que ni siquiera están las respuestas de cada uno a las preguntas que hace el presentador.
La primera pregunta: ¿Disfrutan la Feria del Libro o se resignan a sufrirla? (o algo así, no es textual)
Julia Navarro se lanza a una respuesta orgasmática. Que si es un encuentro con los lectores. Que si es una comunión con los autores. Bla bla bla. No son palabras exactas.
María Dueñas da un inteligente pasito atrás. Dice que le agobian las multitudes y los jaleos que no vienen muy a cuento.
Reig retoma la pregunta y contesta que "se resigna a ser feliz".
Uno escucha a Rafael Reig y dice: ¡Coño, eso es un escritor!
"Se resigna a ser feliz" y después lo compara con esas noches de fiesta en las que sales sin mmuchas ganas a la calle y finaalmente te lo acabas pasando bien pero como si arrastraran una cierta pereza. Entonces, Julia que se ve fuera del tono más irónico y con más retranca de Dueñas y Reig hace un apunte diciendo: Pero las ferias del libro a mí me gustan. Reig contesta: "Y a mí salir por la noche".
Yeah.

No sé si lo he explicado bien pero bueno, siempre podéis ir a Youtube a verlo. Página 2 Especial Sant Jordi 2011. Explicarlo es difícil. Pero verlo es enervante, así que mejor quedarse con lo que os cuento que pasar un mal rato.

Después Julia Navarro cuenta que con su nuevo libro, o con el de antes, no lo sé, regala un cedé con las canciones que escuchan los personajes. Lo de vender libros con extras, creo que no casa con ningún profesional serio de laa literaura. No tiene que ver con la Literatura. Son cosas más bien de periodicos, lo de regalar cedés o tazas, o delantales, o deuvedés, o películas o documentales o el cómo se hizo o yo que sé.

¿Qué dice Reig? Que en su próximo libro regalará muestras del whiskey que se ha bebido escribiéndolo. Pequeñas botellitas como las de muestra, con cada libro.
No llega a ser faltón, porque lo dice con humor pero si yo fuera Julia Navarro y llevara sus pendientes de perla, pues estaría mosqueada en plan: ¿Este tío del bigote se ríe de mí o es que es así? María Dueñas, sin embargo, a pesar de confesar que comparte muchos lectores con Navarro, parece que está más próxima a la ironía de Reig que a los inventos de mercadotecnica de la editorial de Julia. Para mí, hubiera sido un debate mucho más propio con tres mujeres. En lugar de Reig, la que quedó segunda en el Planeta. pues hubiera sido más propio. Y a Reig pues lo juntas con Mendoza o con algún otro, pero de otra cuerda, de otro calado. Sin desmerecer a Dueñas y Navarro, yo las veo como autoras de otra división, superior en ventas muy probablemente pero inferior en ironía, en referencias. No se. Reig al ser preguntado por si tiene al lector en mente cuando escribe, contesta que siente que tiene a Tolstoi y a Galdós mirándole por encima dle hombro. A eso me refiero al decir referencias. Al final, el papel de herético le obliga a ir más allá y a modo de epílogo, cuando el presentador (no me sé el nombre, ni lo voy a buscar) y después de que Julia Navarro exprese su preocupación por los derechos de autor y la propiedad intelectual, Rafael Reig remata la charla diciendo que él está en contra de toda propiedad, ahí lo llevas. Ahí lo llevas. En contra de toda propiedad. Demasiado. Lo más. Botellines de muestra de whiskey y pro okupa, anti propiedad privada, yo que sé, anti todo. Y puestos a ser anti, yo soy anti Página 2.

Es un programa con ese rollo moderno de hacer de las cortinillas, un campo de experimentación para los cámaras y para alternar imágenes oníricas con planos en los que el presentador anda de aquí para allá y bueno, no sé, el programa de música de TVE Mapa Sonoro, también hace lo mismo. No está mal. Vale. No está mal. Quedan guay los planos esos pero, para los que nos interesa la música y la literatura, ¿no sería mejor ahorrarse los planos de los raíles del metro, de los paisajes a través de la ventana o de los paseos por El Retiro o por las ramblas de Barcelona o los planos llegando a la estación de Sants? ¿Qué aportan? Documentan el camino del periodista, que graba sus trayectos de un sitio a otro, de una estación a un hotel, a una cafetería, a un restaurante, a una biblioteca, etc, etc... ¿No sería mejor aprovechar ese tiempo para gente, autores o grupos, que no tienen tiempo en los medios?

¿Quién sale en Página 2? ¿Son los escritores que me interesan? Definitivamente, no. Después del debate bajo el Palacio de Cristal, el presentador se para en un banco del parque con Lorenzo Silva. Seguimos en el Especial Sant Jordi, que en un alarde de incoherencia comienza en el parque de El Retiro de la capital. Allí está el bueno de Lorenzo Silva, al que veo muy avenjetado. Pienso entonces que la gente que escribe en prensa escrita envejece más rápido o eso nos parece porque estamos aconstumbrados a ver su carita, junto a la columna, con una foto de un par de años atrás en casi todos los casos. Ahí está Lorenzo Silva con bastante pinta de cansado y viejuno. El presentador le pregunta por la apuesta del escritor, que la tilda de arriesgada y visionaria poco menos, al colgar todas sus novelas y todos sus textos electrónicos en su página web a un precio bastante razonable. Vaya. Lo visionario sería colgar los textos gratis y aceptar donaciones a cambio de un cierto número de descargas. Básicamente la noticia es que Lorenzo Silva vende sus libros a través de su página web. Yeah. Vaya noticia. Lo del libro electrónico es que me revienta las pelotas, sinceramente. Luego de eso, lo despacha con un par de predicciones de futuro y listo, el presentador se va a otra cosa y la cámara se dedica a seguir filmando brriznas de hierba, reflejos del sol y nosequé más.

Lo peor aún no ha llegado. En Barcelona juntan a dos ¿escritores? a hablar entre ellos. Una mujer que escribe libros sobre sexo y un chico con los dos brazos tatuados de arriba a abajo que ha escrito un libro sobre invertir en bolsa y hacer lo que te de la gana. Podría buscar los nombres de los autores pero paso. El presentador ni siquiera interviene en esta parte, los deja a los dos solos que se apañen. No nos muestran sus libros hasta el final de la charla, así que cuando empiezan a departir no tenemos ni la menor idea de quienes son. Hablan de sexo. Vaya. Este programa es la ostia. Luego el tatuado habla de bolsa con términos técnicos en inglés. Y bueno, los dos aprovechan sus minutos de promoción con la mejor de sus sonrisas aunque parecen ser conscientes en todo momento del importante matiz de que su charla no tiene el menor sentido ni el menor interés. Los despachan en cuestión de cinco minutos, también.

¿Y qué tiene que ver un libro de sexo con la Literatura, que la escribo en mayúsculas para que se evidencie más el despropósito?¿Qué tiene que ver con los libros, con los lectores, con los pocos o muchos aficionados a la lectura de este país, un libro que te enseña a invertir en bolsa? ¿Qué tiene que ver? Es una suerte que haya un programa sobre libros en las televisiones públicas, he oido decir a alguien a veces refiriéndose también a los programas del ramo de las autonómicas, pero ¿qué tienen que ver ese tipo de programas, que yo definiría de novedades editoriales, con la Literatura? Por desgracia, el armazón hace muy creíble el programa y parece que es bueno y todo pero a mí me parece una bazofia y la entonación del presentador me enerva sinceramente y el poco manejo de los tiempos en las entrevistas, la carencia de empatía, recuerdo la entrevista a James Ellroy, centrada en todo lo que había alrededor de sus libros y sin preguntarle por ellos en realidad. A eso, no me pliego. no quiero. Es bazofia. Prefiero la nada a eso. Prefiero que no haya espacio para las novedades editoriales, que ni siquiera literarias, en la televisión a tener que tragarme ese híbrido de autores reales y "escritores" de no Literatura. Apesta a negocio chungo. No me gusta Página 2 y quería explayarme un poco.

PD:  Lo de hacer camisas para el presentador con el logotipo del programa me parece una catetada de tomo y lomo que ayuda muy poco al producto final y no beneficia en nada a la producción. Gastar dinero en tonterías. ¿Para que hacer camisas con el logotipo de un programa de literatura para que las lleve el presentador? ¿Se ahorran al encargado de vestuario o qué? ¿En eso gastan presupuesto, en serigrafía? ¿Serigrafíar camisas? Muy literario, sí. Muy útil. En fin, me voy a tomar un café y no son horas de café.

No hay comentarios:

Publicar un comentario