Acerca de escribir sobre Sergio Dalma

"Tengo que escribir algo sobre Sergio Dalma y su último disco", dije el otro día mientras comíamos en un bar y aparecía el mencionado artista en la televisión. "¿Sobre Sergio Dalma? Pues vaya."
El tema sobre el que escribes es importante. Decidir con qué vas a perder el tiempo. No es cosa para tomar a la ligera y menos si escribes sobre música, si opinas, si te haces eco de las noticias o de las listas de ventas. Lo veo como cruzar una raya. El umbral de lo temporal.
Escribir sobre Sergio Dalma no es sólo escribir sobre un cantante que no me interesa en absoluto, es también pasar la línea. No sé la línea de qué, pero no cabe duda, de que hay una línea, clara y bien trazada, y determinadas personas o personajes o artiistas o líderes políticos (¿hablaré de política algún día? Es lo siguiente, desde luego) están al otro lado... Es el caso. Sergio Dalma está al otro lado. O eso creo. Escribir como forma de posicionarte. No soy de ellos. Elegir el tema con meticulosidad, escribir sobre lo que me gustaría leer en alguna columna, encontrar mi visión en prensa. Hablar de banalidades no es buena idea. Estoy convencido. Es un paso del que me arrepentiré. Sergio Dalma tiene la culpa. Su último disco. No enlazarlo me da cierta tranquilidad. Es decir, no tiene la menor importancia lo que escriba aquí. No lo publicito. Es un ajuste de cuentas personal. Eso me tranquiliza.
Escribir sobre Sergio Dalma. Esa simple idea me agobia, no pienso buscar una foto en google para adornar esta entrada. ¿Es necesario? No, claro que no. Todos sabemos quien es. Sabemos incluso su nombre de pila (tampoco lo pondré). Esa es la línea a la que me refería. Escribir entradas en el blog que no necesiten fotos es el principio del fin.
Bienvenidos pues. Escribir sobre Sergio Dalma no es sólo eso. Es más. Es peligroso.
Ahí voy. Deseadme suerte.
A ver, no es especialmente interesante hablar de ello pero que el disco de las navidades 2010/11 haya sido "Via Dalma", un disco de versiones de canciones italianas de todas las décadas me parece digno de comentar. El primer single es "Tú", una canción de Umberto Tozzi que fue éxito hace 31 años.
¡31 años!
Me parece un escándalo. O no. Es sintomático. O no.
¿Tres décadas? Y no es una canción que se haya olvidado, la versión original se radia con regularidad en las emisoras del ramo.
¿Era necesaria una versión? ¿Era necesario, Sergio Dalma?
No lo sé. He pensado muchas veces en la diferencias entre el "starsystem" americano y lo homogable en España que no es ni "star" ni "system", a mi modo de ver, pero es. Quiero decir, nadie se extrañaría si una gran voz americana, que se yo, el que se les ocurra, grabara un disco de versiones de canciones italianas, por ejemplo. Sería un disco más, de un gran cantante, una curiosidad.
Lo de grabar versiones de las canciones italianas no es nuevo. En la década de los sesenta y setenta era habitual. La fusión de éxitos, la importación de tonadillas.
Me surgen algunas preguntas. ¿El mercado discográfico español sigue anclando en el Festival de San Remo? Lo más vendido es un disco de versiones con éxitos de hace más de treinta años. ¡Treinta años!
Que Sergio Dalma haga lo que quiera. Si se gana el pan, así. De acuerdo. ¿Qué problema hay? Ninguno, claro. El problema es de los que compran discos o de los que se dedican a venderlos.
¿El mejor producto, el más vendido, es un reciclaje de canciones con más de tres décadas encima?
¿Es lo mejor que se puede ofrecer? ¿Es lo que la gente quiere? ¿Es el nivel?
¿El perfil de los compradores de discos es tan siniestro como parece?
Me gustan las canciones italianas. Siempre me han gustado, me gusta Umberto Tozzi. Me recuerda a mi infancia. Tengo 32 años. Lo mismo que "Tu", el éxito revisitado y lanzado como single.
¿Tan pocas ideas hay? ¿No quedan compositores profesionales en España a los que pueda recurrir un cantante melódico de reconocida trayectoria como Sergio Dalma?
No tengo nada contra Sergio Dalma. Tampoco a favor.
Escribo esto por la falta de ideas y por, la que considero yo, alarmante situación del mercado discográfico que ante los cambios en la difusión, la eclosión de internet, los nuevos formatos y todo lo que pasa ahí fuera, se decide por la canción italiana. La versión. Una vez más.
Me alegro por los Tozzi y los derechos que estarán cobrando a cuenta de este disco pero me entristezco mucho por el panorama que veo.
Y ya está. Ya he escrito un texto sobre Sergio Dalma. No era para tanto.
El principio del fin, en cualquier caso.
Dentro de poco, crónica política.
La decadencia en sí misma.
Saludos.