No estoy para escribir en el blog a estas horas.
Pero me apetece mucho.
No estoy, ya digo.
Tampoco de algo en concreto, como cuando le dices a alguien, no, por charlar, y te dice, pero que quieres hablar de qué y tú contestas, no, por charlar.
Me apetece rollo por charlar en el blog, pero me empieza a doler la cabeza, a mí que nunca me duele la cabeza, a los que nunca nos duele la cabeza nos gusta presumir ante los de las cafaleas continuas, y los de las alergias, en fin, es parecido. Tampoco tienen culpa los chiquillos, ¿no? Estoy de un exculpador de abuela que ni me aguanto pero es lo que tiene el apetecer, el querer agradar... En general. Generalizando. Que siempre se generaliza para mal. Coñe.
Apetece que ya es.
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