Llevo todo apuntado para cada día y cargo las alforjas de cada 24h demasiado, consciente de que será casi imposible hacerlo todo. La utopía tiene que serlo hasta el final. Tiene que quedarse sin hacer, pero eso que tacho o que tapo con un NO en mayúsculas bien de tinta, me pesa como una losa a pesar de la dificultad de la empresa y de ir a sabiendas. Me explico de pena. Que me jode y no debería. Tengo la cabeza como un bombo. Voy a desgranar, a ver, que lo de escribir aquí siempre es imprevisto. Va a rachas. Muy del volunto. No lo planeo y vómito lo que viene. Me vomita a mi lo que no se digiere en el día a día, de esa bilis pues estas palabras. En la regurgitación diaria pues algo asoma, un tropezón de vida que se resiste a desintegrarse. Voy para arriba y para abajo todo el puto día. La furgo no tiene radio y canto yo. Según el ánimo le tiro por Camarón o Los Panchos o me arranco por éxitos casposos de radiofórmula que me vienen a la mente como perdigonazos. De los ochenta. Un horror. Neuronas con tonadillas incrustadas que se niegan a desintegrarse. Y a qué venía todo esto. Pues eso digo yo. Hoy venía berreando All by myyyyseeelf.... A grito pelado. Estoy hecho mistos. Ay.
Estoy mirando una web de alquiler de martillos neumáticos. Aún no me han llamado del taller. Le temo a la reparación y más a que no la tengo. Estoy currando para pagar eso lo primero. El mazo llega hasta donde llega. Qué buena inversión fue. Anda que no he roto cosas. Me pongo música. Con cascos. Me aburro como una ostra y sudo como un cochino. Como un cochino con cascos y cara de ostra. Me quejo de vicio. Alquiler de maquinaria pesada. Quién te lo iba a decir. Pesadas todo lo que quieras, pero maquinaria hemos manejado poca. Todo va guay. Guay y lento. A paso de desesperación. La cosa va como la seda. Hoy he tenido una jornada intensiva de picado y sacado de arena. He buscado símiles con lo de grabar. Es el proceso. Picar piedra y configurar micros es lo mismo. Ni se parece, vale. Pero forma parte del proceso. Todo es un proceso. Desde que aparece el acorde que enlaza hasta que asoma la letra o la hacemos del tirón en el ensayo. Igual escribir. O hacer una obra. Se parece poco a primera vista pero es de eso que te metes y no sabes por dónde vas a salir. Como un bosque. Y necesitamos perspectiva. Y puntos de referencia. Y trabajo en equipo. Ahora voy tirando solo pero tiene que venir un fontanero y un electricista como mínimo y en ese orden, y unos albañiles que ayuden. Que es tela. Dar con el mazo es como seguir el metrónomo. En eso se parece. Aquí me desahogo y ya está. Es mi Querido Diario. Os podéis ir cuando queráis. Como siempre le he dicho a todas y todos. Derecho de admisión al revés. Derecho de omisión. Derecho de inmersión. Derecho al sofá a dormir de una vez y que se acabe ya hoy. Que vaya día de mierda.
Mi situación es kafkiana. A mi Kafka siempre me gustó o sea que bien. El proceso. Cómo escribir una tesis. Como una misión de vida. Como ser una cucaracha. O lo que sea. Leer mil veces los primeros párrafos. Sentir que cada frase está esculpida. Que el sustantivo se cincela con el adjetivo correcto en el primer capítulo atento al parpadeo. Repetir y repetir. Minucioso. Detallado. Con un ritmo. Un respirar. Una cadencia en la escritura. Todo al dedillo. Y luego el trazo gordo del desenlace. El descuido en la acción cuando se desencadena. Y al final un sin Dios y párrafos deslabazados. Ideas por terminar. La sensación de no hacer nada o no acabar. Una parte muy pequeña. Es igual en una obra o un disco. Grabar. O lo que sea. Cambiar las cosas de sitio. Cambiar los sitios de cosas. Volver a empezar. Dejarte algo enchufado. Olvidar un detalle importante. Una parte muy pequeña. Que lo jode todo o al revés. El ruido blanco me despierta a veces porque me dejó puestos los altavoces y cuando cae la señal, aparece un zumbido. Un libro cerrado, un folleto si acaso. Me explico horrible. Hago lo que puedo. El zumbido acojona. Ha sido un lunes cargado y no he puesto la lavadora. Que lo tenía en mente. Pero he hecho otras mil cosas. Todas apuntadas previamente en mi compendio de garabatos. Lo de la lavadora estaba. Creo que al apuntar lo que sea, siento que ya se va haciendo. En parte es verdad. Una parte muy pequeña.