jueves, 26 de junio de 2014

Un sitio donde nadie te escuche

Mis vecinos en verano. Estoy acostumbrado al silencio dela urbanización. Me irrita particularmente escuchar las voces de los niños. Las ventanas abiertas. Los golpes de los platos. Si es que no escuchamos las barbacoas... Cuando hay barbacoas alrededor, es necesario el modo búnker. Se suda. Se sufre. Mola el silencio de los inviernos, que es desolador a veces. Mola el silencio en general. Yo pongo radio en la cocina y la tele en el salón, que no es que el silencio reine. Me gusta que haya ruido. Los vecinos no entienden que se les oye mucho. Pero porque no viven aquí todo el año. Yo puedo tocar a cualquier hora. Como lo de la Woolf un cuarto para tu ruido. Para tu dolor. Para gritar y llorar a gusto. Para desgarrarse. Un matadero. De emociones, se entiende. El call center de la desesperación propia. Mis emociones en verano. Gritan tanto o más que mis vecinos. Se agudiza mi soledad. Y el patio que es una guerra. Ahora se oyen martillazos. Hay que ver. Se pillan unos días y no paran de hacer cosas. Pongo la música. A todo trapo.
La acústica es complicada. Por alguna ventana se cuela toda la vida. Se oyen limpiadores hidráulicos. Son como aviones. Pasan coches. De vez en cuando se escapa un claxón. Tengo la televisión puesta. Se oye pero no se pueden seguir las conversaciones. Los padres gritan. Los padres regañan. Los niños lloran. O se quejan. Trato de no escucharles. Es importante que no escuches.  Entrenarse en eso. En no prestar atención. Dejar los ojos en el vacío. No mirar nada. No reaccionar. Quedarse petrificado. Pensando en tus cosas. Pensando mucho en ello. No atender a los vecinos. No atender a los niños. No atender a los padres. A sus quejas. A los juegos. A la pelota que bota. A la zambullida que retumba. Es que, joder vale, es la época. Es ahora. Es lo que pega. Es normal.
El silencio de la urbanización tiene la culpa de todo. Antes me daba miedo. Es normal todo. Los miedos, sobre todo. Aunque sean tontos. A oir ruidos. Lo habré contado mil veces. Fue de los primeros días. Durmiendo aquí. Había bultos de todo tipo. Cajas y muebles varados. Como si los hubieran salvado de una inundación. Una profunda carga telúrica. Un olor muy concreto. Dormía y no había muchas bombillas. Explotan. Eso sigue pasando.Es por el frío me dijeron. No lo tengo claro. Pero siempre estaba esa oscuridad. Una oscuridad familiar, por otra parte. Una cosa tranquila pero por momentos, escalofriante. La vida misma. Y pasaba que se me hacían largas las noches. Por un motivo o por otro, la cabeza no paraba en ese silencio helado. La cabeza de madrugada. Al galope. Imparable y son las tres. Sin casi poder hacer otra cosa. Imposible leer o atender a una película. Música de fondo, eso sí. No había televisión. No había voces. Esa oscuridad. Ese silencio. Todos los enseres de mis familiares fallecidos. En habitaciones. Sin orden. Conforme se iba descargando. Con la siniestra lógica de las mudanzas. Con la lógica siniestra de la muerte.
Me asustaba todo eso, supongo. Ya no. Me reconforta. Con el que se acostumbra a un fantasma y termina por charlar animadamente con las presencias. Y escucharlas. No había voces, eso sí. La mía grabándome mientras cantaba con la cámara del trabajo. El caso es que nació un gatito. Y lloraba. Y eran las cinco de la mañana y parecía el llanto de un bebé. Humano, quiero decir. Me acojoné de verdad. Y pensé, has fumado demasiado, tio.
Gran verdad, la diga cuando la diga.
El caso es que ya todo está bien. Y es importante eso. Confrontar el miedo inicial a estar solo o a oir voces. A enfrentar el pasado, sea como sea. Es importante. El silencio y enfrentarlo, sea cual sea el motivo. Y cantar. Desafinar con todo. Sea cual sea el motivo. Es importante que no te escuchen. Que no escuches. Que no te juzgues tú mismo y te parezca poco. Siempre es poco. Todo es casi nada. Las cosas se acaban demasiado pronto. A veces no se les puede ni llamar cosa. Pero es así. Así es como pasa. Y está bien que pase. Que vaya pasando.
Un sitio donde nadie te escuche
Un sitio donde nadie te lea
Un sitio donde nadie te vea

Para bailar.
O cantar.
O las dos cosas.

Un sitio donde nadie te vea cómo lo intentas.
Pues eso mismo.

miércoles, 25 de junio de 2014

Frio sano

Lo sabía y creo que hasta lo he comentado en el blog. El frio es sano. Sabía que mi casita y sus rendijas me daban la vida por algún motivo pero no tenía claro si era una coartada o un consuelo, por lo difícil que es calentar el salón en invierno, pero la intuición me decía que venía bien. Aquí, el aval científico: http://www.20minutos.es/noticia/2175199/0/frio-temperatura-baja/grasa-parda/obesidad-diabetes/

Frio sano. Me siento tentado. ¿Lo será en otras facetas de la vida? Mi corazón en los últimos tiempos es una cámara frigorífica. Lo que parece malo, pero no lo es tanto en realidad, como el irrefutable hecho de que la cámara frigorífica está alarmantemente vacía. Porque, al fin y al cabo, si está llena, a pesar del hielo, de la escarcha, del aguilla que sueltan las cosas, que es marrón y que da un mal rollo que flipas, a pesar de todo eso, pues mira. Si está llena, es menos. Lleno, todo es menos. Medio lleno. Medio vacío. Puede que funcione con los vasos, no con las cámaras frigoríficas. Lo peor que tienen, por lo tocante a mi experiencia, es el olor. Olor a cerrado. Olor a comida en pausa. Como en el VHS. Alimentos temblando de frio. Tiritando como gorriones en invierno sobre un cable. Como los golpes en la cinta magnética. Está ya trallada, en general. Mi corazón, decía. Caso de que siga ahí. que lo dudo. Supongo que me lo robaron hace tiempo. Y pedí la renovación, como con el DNI, la renovación de corazón pero no me ha llegado o quizá lo he vuelto a perder. En fin. Será por metáforas. Uno es muy de echarle la culpa a los demás. El caso es que si mi corazón fuera una cinta de VHS pues está bastante gastaete. Se ha grabado mucho encima, ¿me explico? Hay mucha nieve. Muchas líneas grises que atraviesan la pantalla. Se ve. Con rayas. Pero se ve. Y eso es  llevarlo a mi terreno lo del frio sano. Porque lo pienso a veces. Que esta ausencia de corazón, de sentimiento o incluso de sexo, que está bastante ausente también, para qué inventar otra cosa, pues... ¡igual es sano! Es una idea loca, lo reconozco. Pero quién sabes, igual en un tiempo sale un estudio que la solteria o la castidad es buena para la salud. Que no lo creo. Porque lo que es en ansiedad, o en... No sé. ¿Salud mental? Pero no es mental, realmente. Tiene que ver más con lo espiritual. Un cierto tipo de comunicación intima. Comunicación íntima. Es un concepto como para darle un par de vueltas. Por ahora no he leído nada de soledad sana. Más bien al revés, uno intuye que la soledad es básicamente dañina y sobre todo, a la larga. No hay más que ver a los viejecillos que salen en el programa de Juan Imedio. Es que cuando entra la noche, Juan. Esa frase me perturba. Cuando entra la noche. Hay que poner voz de que te vas a morir pronto y lo sabes. Es que cuando entra la noche, Juan. Durante el día, bueno... Haces tus cosas. Sales a comprar. Vuelves. Comes... Pero cuando entra la noche, Juan.

He buscado un enlace que he visto en Facebook varias veces estas semanas, no lo he encontrado. Era algo así como: Ventajas de practicar sexo a diario. Algo así. O diez ventajas. O diez hechos científicos... Tenía algo de científico, creo. Y la gente que lo compartía me hacen sacar una sonrisa. A mí me gusta la ironía en Facebook y eso no tiene ninguna, creo. No sé. Me hace gracia. No lo he encontrado, claro. Pienso en ella. Vaya enfermedad de melancolía, que arrastro, eh. Lo reconozco. A veces lo trato de ver como una cantera. Una mina de sentimientos enfermos y dolidos. Una mina de dolor. Para las canciones pero para todo en realidad. Es algo bueno, desde ese punto de vista. Lo del enlace, el de Facebook, el que no he encontrado me parece del todo impúdico y feo. Será porque no estoy sano. Científicamente hablando. Sano no estoy, no hay que ser doctor para saberlo. Está claro. Sano no. Malsano igual tampoco. Pero, ya se sabe, la mina te come la salud. El frio vale que sea sano, pero los pulmones en la mina se van muriendo poco a poco. Respirar siempre pasado. Respirar el aire envasado de los recuerdos. Salen canciones, eso es cierto. A corazón quitado. Ayer dije eso por primera vez, una mezcla. De a calzón quitado y a corazón abierto.

lunes, 23 de junio de 2014

Autostop tour

Se me ha ocurrido: Autostop tour

Salir con diez euros o con un billete, el que sea, una cantidad simbólica.
Teléfono. Cargador. Afinador. Guitarra. Estuche. Pandereta y ya está.
Bueno, y algo de merchan, lo que sea: fanzines, pegatinas, chapas, alguna camiseta, cds, maquetas... Lo que sea. Para que te echen una mano. Sin tarjeta de crédito. Ni maleta. Ni nada.

Haciendo autostop.
De gira.
Sin ningún sitio cerrado previamente, todo sobre la marcha.
Y dejando un diario de ello. Podría estar guapo. Y pasar fatiga. Eso sí, pasar fatiguillas y contarlas, y tal. Estaría bien atreverse. Ver qué pasa. Quizá algún día o algún verano me atreva....

domingo, 22 de junio de 2014

Agradecidos

Ha sido una primavera genial. ¡Gracias a todos los que habéis hecho de florecilla incluso los que no tenían ni una línea de texto!


PD: Le temo al verano. Pende de un hilo pero pinta bien.

El burro

la poligamía es poco higiénica o no es poligamía y NO ME BAJO DEL BURRO, ¡señora!

Esta semana empezamos a grabar con Enrique Octavo (II)

Pues ya hemos empezado.
Es un rollazo grabar que lo flipas. Dicho esto, he disfrutado como un enano con mi primera grabacion. Con Mothers against drugs, grabamos seis temas.
El ep de Charles Bronson.
Lo podéis escuchar aquí, pero en realidad, yo solo fui a grabar las voces cuando ya estaba prácticamente todo hecho y no participé en nada del proceso, quizá ese sea el motivo de que esta sea como la primera vez y que, por fin, sienta una grabación como plena mía.
Lo de ponerme el nombre de rey tiene que ver con sentir las cosas plenamente mías, más allá de la evidente connotación regia y por supuesto, de maldad.
Os iba a buscar el enlace al ep de Mothers against drugs.
Ahora vuelvo.

Lo he encontrado.
Y me lo he escuchado entero. Dios, sigue sin gustarme absolutamente nada.
No es que está mal hecho, igual está demasiado bien hecho para lo que éramos, para lo que realmente éramos. Que era guay. Lo que éramos. Y no tanto lo que quisimos ser grabando. Es mi opinión. Era mi grupo, pero siempre consenso. Todas las opiniones contaban. Como siempre en realidad en todos los grupos en los que he estado. En mi opinión de nuevo ha envejecido fatal pero porque ya era fatal cuando lo hicimos. Como decía grabé mi parte y punto. Las voces. Mi inglés de Purchil. Y ya. Con errores graves en la conjugación de verbos. Inglés de más allá de Purchil, creo. Pero bueno. Lo grabamos en casa, con un sofá. El sofá aislaba. Un cuadro verme con los auriculares pegando berridos. Porque lo que es cantar, cantaba un pimiento, como siempre en realidad. Al igual que ahora mismo. Acabo de pensar que tener un blog es un seguro de vida para los domingos.
Bueno, os comparto el ep.
Igual después de poneroslo tan bien estáis deseando de escucharlo, o tal vez, no.

Ahí. Va.
El ep de Mothers against drugs.
Del 2006.
Ocho añicos, ná más y ná menos.





Pues eso. Esta era mi experiencia en lo que a grabación se refiere. Y siempre la he sufrido, quiero decir, que incluso oyéndolo ahora lo paso mal. La que me gusta o la veo más pepino es la de "Shaking the onion", el single de siempre, y luché hasta lo indecible para que abriera el ep pero no hubo manera. Las pusimos en el mismo orden que las habíamos compuesto, porque las componíamos entre todos, aunque los guitarrazos de salida era siempre de el aquí escribiente, pero vaya, que apenas si tocada la pandereta y a destiempo... No tocaba en directo ningún instrumento. Saltaba. Brincaba. Tenía un cencerro para una versión que hacíamos. Con el repertorio de versiones tampoco era del todo feliz. You really got me de los Kinks. Me flipan los Kinks, pero justo esa... Play that funky music... Sly and the family stone. Pues un gusto cantarla. Con media letra inventada, claro. Un gusto pero no sé. Day tripper de los Beatles pero casi en versión Whitesnake, pero una caña. Para cerrar. Alguna vez nos atrevimos con una de los Doors, living loving maid, no sé o no recuerdo si en directo, y alguna vez probamos suerte, ya rompiendo la baraja, con Simpathy for the devil, de los Rolling. Hoy en día casi colaríamos como grupo de versiones. Seis nuestras. Seis de otros. Era difícil hacer canciones propias por eso de que tenían que gustarles a todos y cada uno éramos de nuestra padre y nuestra madre. Pero a la grabación, que es a lo que iba. No me gusta. No me gustó. No me gustará.



A lo que vamos
Que hemos empezado a grabar lo de Enrique Octavo.
Que ya es mío cien por cien, aunque nos lo produce un productor y va a hacer cien por cien lo que quiera, pero porque es precisamente lo que yo quiero.
He intentado corromperle la mente lo máximo posible antes de empezar.
Vino a vernos en un ensayo, llevábamos unas semanas inactivos y aunque me sorprendió lo "unitarios" que sonamos pues... Entrecomillar por entrecomillar lo que acabo de hacer pero bueno...
No estaba del todo claro la lista.
Ni el número de canciones aunque le no tener del todo clara la forma de hacer las cosas es a menudo la forma de hacer las cosas que considero más correcta en este tipo de situaciones, de creatividad o de no sé cómo llamarlo... A lo que vamos. Grabar lo que eres. No lo que quieres ser. Si eres una mierda, pues la gente tiende a no querer serlo. Y creo que está bien. O sea, no lo critico. Pero no es para mí. Toco mal. Grabo mal. Y la sorpresa final, es que suena bien. O bueno, suena. Y mira. Es lo que somos. No ser lo que eres en pos de lo que quieres ser...¿en qué ámbito de la vida funciona? ¡En ninguno! Pues entonces... Es que la cosa va mucho más allá es sonar bien o mal. Bien o mal. Lo bueno. Lo malo. De qué hablamos, amigos. Educación judeocristiana. Afinación en 440. De qué va la vaina. Es lo que pasa. Que al final no quieres que salga mal, quieres que salga bien. Con los muchachos he tenido que hacer hincapié en eso, que no quiero que salga mal. Ellos piensan que quiero que salga mal, de hecho, una líneas más arriba creo que lo he dicho abiertamente, quiero que salga mal, pero no, quería decir, quiero que salga como tenga que salir. Si es mal, pues así. Confío, claro, que va a salir bien. Pero quiero que sea la verdad. Que es una canción de Cuello que me gusta. De su primer disco. La última. La verdad.

nota mental:
el rollo ir de hit
no puedo con él, en serio, ir de hit, no
prefiero ir de hot

Mujeres, menos es más

Paradoja: He estado con más mujeres de las que me hubiera gustado... y, ¡voy a estar con menos de las que me gustaría!

viernes, 20 de junio de 2014

Ponerle el no en la boca

Hay gente que lo necesita. Que les cuesta. Lo entiendo.
No es fácil decir no a veces, no es nada fácil. Las cosas no son fáciles en realidad.
Ser negativo tampoco lo es.

lunes, 16 de junio de 2014

Esta semana empezamos a grabar con Enrique Octavo

Una vez a la semana me gusta contaros cosas sin mucho orden ni motivaciones particulares, simplemente escribir y bueno, no sé, esperar a que salga algo interesante, lo que no es, claro está, la mejor forma de que aflore lo interesante, pero bueno, me gusta eso, ponerlo un poco.... Qué palabra utilizar, no lo sé... Lo que sea.... El diario. Es el rollo de escribir un diario. Y abrirse... Ella decía que yo me abría demasiado aquí, que cómo no me daba pudor... Pero si no cuento ná, era mi respuesta. Lo sigo creyendo. Y si no lo lee nadie... Esa era la segunda parte de mi respuesta. Es raro porque no es cierto. Lo lee gente. Lo sé. Veo las estadísticas. Pero me gusta escribir como si no hubiera nadie al otro lado. No tenerlo en cuenta. Cuando lo tienes en el punto de mira... O no sé cómo decirlo... En fin, tampoco debería mentarla tan a menudo. La semana pasada, después de nombrarla con el pronombre que ya me parece muchísimo, pues vi una foto. Una foto. Seis meses sin ver fotos. Lo de las fotos es un tema. Vivimos en la dictadura de la fotogenia. ¿Ya os hablé de eso? La dictadura de la fotogenia. Da para una entrada entera. Yo es que salgo más bien mal en las fotos... De ahí viene todo. Pero bueno, no era de lo que os quería hablar. Porque quería que fuera nada de lo que hablase y ya que fueran saliendo cositas. Cositas. Esta semana van a pasar algunas cositas. Me gustaría daros un parrafito de cada movidilla. No quiero decir demasiado.... Vamos a grabar, ya os lo conté, ¿no?
Una grabación de Enrique Octavo.
No somos un grupo normal o al uso por muchos motivos que supongo que os interesarán absolutamente nada, pero como la mayoría de lo que escribo aquí. I know. O más bien, lo presupongo.
Grabar es siempre una aventura.
Tocar en directo son dos aventuras: Ir y volver.
Llevamos más de un mes sin ensayar. Desde el 8 de mayo, que fue jueves, para ser más concretos. Hoy he hecho la cuenta. No me considero músico. No sé si es una aclaración necesaria, pero ni soy músico ni nunca he aspirado a serlo, me da envidia la gente que sabe mover los dedos y aún más los que entienden de armonía. A mí solo me sobra el sentimiento. Y eso que últimamente mi vida sentimental es la de un gorila solitario en un zoo. Pero bueno... Quedan los recuerdos, ¿no? No es bueno sublimar los recuerdos. No es bueno sublimar nada. Tengo recuerdos como para ocho mil discos dobles. Me dan coraje los discos dobles. Mi grupo es un grupo. Que sí, que es mi proyecto y todo eso. Que muchas veces me llaman a mí Enrique Octavo porque es como que lo identifican conmigo mismo, pues vale. Pero soy Jose. Enrique Octavo es el grupo. Antes me fastidiaba un poco, sobre todo los que saben que me llamo Jose. Pues que me llamen Jose. Así lo veía. Hoy me da igual. Que me llamen lo que quieran, me da lo mismo. Pero vaya que soy Jose y Enrique Octavo es el nombre del grupo... Se me ocurrió con el nombre de un grupo de Argentina, Juana la Loca... Nunca los escuché. Alguien citó el nombre. Me pareció muy fuerte. Muy cañero. No sé qué música hacían y con mi primera banda cometí el error de ponerle un nombre en inglés, con tres palabras y una pronunciación o más bien una fonética más bien dificililla... No me iba a volver a pasar.
Me encanta la gente que usa el diminutivo con la palabra algunos.
Algunillos.
Algunillas.
Tengo algunillas cosas que decir sobre las grabaciones.
Por lo pronto, no me gustan. Me estresa. Quizá por eso escribo esto, por puro estrés.

Pues eso.
Nervioso.
Que estoy nervioso.
Todo lo demás es poco importante.

Hacerse superhéroe por vocación

El viernes estaba de cháchara con un colega.... Y le dije: Hubo una época en la que me sentía como un superhéroe.... Y me refería más a una venate quijotesco de desfacer entuertos, que al hecho de sentir de forma cierta que tenía súperpoderes o que era mutante... Aunque también debo decir que cuando tenía tres o cuatros años, yo creía que tenía poderes en los ojos, pero luego resultó ser hipermetropía y me pusieron gafas, y antes un parche, que me daba quizá un cierto look mutante pero que desde luego, no incrementó mis supuestos poderes. A ver, que poderes no tengo. Pero que en muchas ocasiones he sentido esa llamada del Batman interior.. Vosotros sabéis. La clara y gritona llamada del bien en tu interior. Y al ver injusticias... Altercados... Abusos... Pues uno sentía que tenía que actuar... Ya no. Ya no me pasa. Porque tontamente pues te puedes comer un buen galleto o vete a saber, algo incluso peor. Y comentando esto con mi colega Tony, me puso al día de lo que os enlazo a continuación. Ya lo puse en Facebook y twitter, pero creo que no es suficiente...

¡¡¡Un documental de superhéroes reales de Estados Unidos!!!

sábado, 14 de junio de 2014

me he cambiado la foto de perfil



Odio cambiar de foto de perfil. Últimamente lo hago mucho porque ninguna me gusta. Vivimos en tiempo de la dictadura de la fotogenia. me gustaría escribir una entrada sobre ello. Si alguien sale bien en las fotos, lleva mucho ganao. Hablo en serio. Muchas veces ocurre, con chicas, que las ves o más bien dejas de verlas y al tiempo, ves una fotillo que cuelga la linda muchacha y dices: ¿Por qué dejamos de vernos? Pues, porque la has visto en persona y no es esa foto. Cierto. Pero esa foto existe y...Quiero decir. Está ahí. Cierra los ojos. Piensas. Dices. Qué mona la jodía. La gente que no salimos bien en las fotos, somos mejores personas. Yo defiendo eso.

viernes, 13 de junio de 2014

Ver la luz

cada uno con su cruz, cada uno con su inquietud, cada uno a buscar refugio entre la multitud, bienvenido al club de los que están peor que tú, los que no se pueden quejar de sus vacaciones, nunca pienses en tu propio ataúd, nunca piensas que será para bien, ahora empiezo a ver la luz, ahora que no estás tú, ahora empiezo a ver la luz, ahora que no estás tú, antes todos los días eran lunes, antes todo era un túnel, ahora empiezo a ver la luz, ahora que no estás tú, ahora me curo en salud, ahora empiezo a ver la luz http://youtu.be/Ms_orgISuwM





ya empiezo a ver la luz, ya empiezo a ver la luz, bienvenido al club de los que están peor que tú, tu te quejas, tienes tus razones, yo ni siquiera me puedo quejar, no tengo a nadie que me escuche, pero empiezo a ver la luz, ya empiezo a ver la luz, desde que ya no estás tú, ya empiezo a ver la luz, antes era todo un túnel, todos los días eran lunes, ahora ya empiezo a ver, ya empiezo a ver la luz, todos tienen opiniones, todos tienen sus canciones, todos tienes vacaciones, se quejan de sus vacaciones, menos tú, ya empiezo a ver la luz http://youtu.be/f-KcC0LXYdk



miércoles, 11 de junio de 2014

Bailando en la ducha

Ayer mientras estaba en la ducha, pusieron esta canción en la radio de casualidad.
Lo flipé, claro.



lunes, 9 de junio de 2014

Presencia

Esa ficción de presencia que me atormenta es digna de estudio. En el fondo parece tan calculado como cualquiera de los otros pasos, y es un modo de dejar abierta la herida, o quizá no, y yo pienso mucho, ya sabéis, demasiado. O sea, que me meto los dedos en la herida para saber si está curada o me rasco las costras, en fin, mis cosas. Y así. Son mis cosas. Mis costras. Mis heridas. Mis tiempos. Mis dudas. Mis recuerdos. Mis idas y venidas. Todo mío pero teñido de una presencia que lo cambia todo. Su presencia. Ella. Eso. Eso que me condiciona de un modo que no entiendo... Y en cierto modo, me enerva. Porque era yo. Era mi amor. Era mi lucha. Era mi trabajo. Sí. Un trabajo. Una labor. De amar. Unas tareas para amar. Y ahora, nada. Tengo que hacer un millón de cosas, y no puedo estar pensando en esto. Esto es lo más estúpido que me ha pasado. Espero con ansía el siguiente estadio de la manía y el coraje. Porque tenerlo, lo tengo. No se cumplieron las reglas. Para eso están, ¿no? Para ignorarlas, ¿no? Pues no. Yo las cumplí. El caso es que me parece un ultraje. Un boicot  la buena intención. A la manera buena de hacer las cosas. Mis cosas. Mis costras. Y la presencia. Como la sal en el mar. Con el mismo efecto pero al revés, en lugar de curar, abriendo más los agujeros de la memoria. Una memoria herida. Dolor por todas partes. La presencia.
Y sé que la guerra no ha acabado y me horripilo a mí mismo escribiendo aquí esto, esto es lo más estúpido que me ha pasado en años.
Seguiremos luchando contra su fantasma.
No es real. Es lo que nos queda.
Nada con ella lo fue. Quizá por eso tenga ahora más sentido. O quizá, no.

domingo, 8 de junio de 2014

ME MOLESTA / NO ME MOLESTA

ME MOLESTA


- las frases hechas
- Los amigos de...
- el servilismo
- los enchufes
- los malos en intenciones en cualquier ámbito de la vida
- los egoístas
- los que te dan lo que ellos no quieren
- los que maltratan animales
- Los que no te conocen o sí en función de quién esté alrededor
- Los que hacen bandera de la amistad para sacar algo a cambio
- el vinagre en la ensalada de col
- los que no escuchan rap porque dicen: No es mi rollo
- la gente que es de un rollo
- los jóvenes que presumen de serlo
- los viejos que presumen de serlo
- presumir en general
- los que te toman por el pito del sereno
- los que te invitan a su casa y luego te dicen: baja la basura
- las que te ponen los cuernos y se justifican diciendo: Estábamos en una mala racha
- las que saludan por compromiso
- los camareros que tardan más de un minuto en decirte: Hola, ahora te atiendo
- los tópicos sobre Andalucía
- los que dicen ser de Granada pero no han nacido aquí
- el ninguneo a los siglos de cultura árabe en Granada particularmente pero en toda España
- el patriotismo de postal
- las herencias
- los restaurantes chinos y en general toda la gastronomía exótica
- la gente que hace sushi, le hace fotos y las cuelga
- los que critican a los que hacen fotos de comida en Instagram
- los que nos hacen esperar diez minutos por costumbre
- los que anulan la cita a la hora de la cita
- los que anulan la cita y simplemente apagan el móvil
- los que cogen el móvil en función de con quien esté
- las chicas que me recuerdan a ella
- el discurso no radical transgénero
- la persecución de los movimientos sociales
- la encarcelación de Carmen y Carlos
- los jueces estrella
- los jueces estrellados
- los árbitros de primera división
- los árbitros comentaristas en televisión
- el Mundial
- los anuncios del Mundial
- el anuncio de Mahou
- el anuncio de Estrella
- el anuncio de Vaginesil
- el anuncio de Iberdrola, cualquiera de ellos
- el anuncio de Cornetto
- los que te miran mal de fiesta si les dice que no bebes o que no te metes
- los que conducen borrachos por costumbre
- los que te miran como si fueras el abuelo de Heidi en los festivales
- que Rosa Benito use en televisión el "Hubieron" con total impunidad
- que la RAE claudique con los errores y los acabe aceptando por el uso
- los homenajes
- los tributos
- las orquestas
- los conciertos que montan los ayuntamientos
- los acústicos
- que se machaque a Amador Mohedano
- la gente que tira las colillas a la playa
- la gente que lleva a sus perros sueltos y dicen: Si no hace nada...
- la gente que va por la vida: Si no hace nada... (pero luego te la hacen)
- los que si no te la dan a la entrada, te la dan a la salida
- los que no respetan nada
- los que no respetan a las novias de otros, o novios
- los que suben el tono de voz para intentar llevar razón
- los que todo el tiempo quieren competir y medírsela a ver quién la tiene más larga
- los que predican
- los que predican sin dar ejemplo
- los que predican en el desierto
- los que predican la resurrección de la carne
- los que predican en púlpitos
- los que predican en columnas de periódico
- los que predican en los informativos
- los que predican en las tertulias
- los que ponen comas antes del predicado
- los que predican de aquello que ni siquiera conocen
- los que no quieren conocer
- los que se vanaglorian de su desconocimiento
- los que se vanaglorian en general
- los que salen en la foto
- los que salen bien en la foto
- la fotogenia en general
- la cultura del etiquetado en Facebook
- Facebook en general
- los que te acribillan a Me gusta por temporadas
- los que no tienen Facebook
- los que usan demasiado Facebook
- los que te hablan en la vida real de tus actualizaciones en Facebook
- los que dicen que si eres activo en Facebook, es porque eres un exhibicionista
- los que se meten con uno en general
- los que se meten con uno por el tema musical en general
- los que son heavys de toda la vida y se creen los putos Mozart solo por tener una digitación rápido
- los sublimadores
- los que hablan sin saber y dan cosas por sentado como si todos asumiéramos que son así
- los que defienden el copyright
- la hija de la famosa tonadillera y su novio, padre de su hijo o hija no lo sé
- que se contrate a Kiko Rivera con dinero público
- la cultura de bolos con famosos de la televisión
- las hienas y lobos que salen del programa Hombres, Mujeres y Viceversa
- los cánones en Mediaset en cuanto a concepto
- los reyes
- los reyes católicos
- los reyes actuales
- el tratamiento regio
- los que no se echan crema porque se ponen morenos enseguida
- los que no contemplan los riesgos de la industria química
- los que asimilan algo limpio con algo que huele a limpiador, es decir, a química
- que se use la palabra "natural" en publicidad
- que se use la palabra "libertad" en publicidad
- el anuncio de Vodafone en donde hablan de "power to periodismo"
- el genocidio de periodistas en España, que lo está sufriendo mi generación y las anteriores
- la poca consistencia de cualquier queja en redes sociales
- que la gente no lea blogs
- que ella no lea mi blog
- la espantada de los dibujantes de El Jueves
- la censura
- la censura previa
- la autocensura
- los censuradores con los que vivimos de cotidiano
- los que nos censuran en nuestro propio ser más genuino
- los que hacen listas de cosas para hacerse los listos
- los que tienen actitud destroyer en las redes sociales y luego son corderitos
- las romerías
- las fiestas con trasfondo religioso
- las romerías que suponen daño al medio ambiente
- las costumbres que no pasan un filtro mínimo de raciocinio
- los que critican de oídas
- los que critican sin oírlo siquiera
- los que lo critican todo por deporte
- los gordos amargados
- los ex gordos amargados
- los delgados amargados
- la amargura en general
- los que les cuentas un plan o un propósito y te dicen: Sí, está guay, pero es muy difícil
- que ella me vigile el Facebook pero no lea mi blog
- que a ellas mi blog les parezca lo peor o en el mejor de los casos, un ladrillaco
- que a ellas les gusten mis canciones pero no yo
- que se pase toda la noche contigo sin intención de pasar la noche contigo
- dormir abrazados en verano
- dormir abrazados en invierno
- abrazarse más de la cuenta
- dormir más de la cuenta
- soñar más de la cuenta
- las noticias sobre aniversarios (¡Los aniversarios no son noticia!)
- que se carguen los géneros periodísticos
- que no se respete a los viejos en general y en las redacciones en particular
- que en la televisión no hay ni un programa musical que no sea un pastiche o un refrito
- los refritos
- los pastiches
- las televisiones públicas como instrumentos de poder
- el poder
- los poderes fácticos
- los poderes de facto
- los que dicen: Querer es poder
- los que pueden y no quieren
- los que no quieren
- los que nunca han querido y no saben querer
- los que gestionan mal sus emociones y te contagian sus disfunciones
- los que escriben poemas en Facebook y los comparten
- los que se guían por las apariencias
- los que creen que nos importa la serie de tv que están viendo
- los que creen que nos importan sus vacaciones
- los que dan por hecho que todo el mundo tiene vacaciones
- los que creen que exista la envidia sana (Y, ¿el odio sano, existe?)
- los que se creen más duros por tocar metal y luego lloran con baladas de Scorpions
- los que no se callan si no es con una hostia
- los fascistas
- los fascistas españoles
- los hijos de los fascistas españoles
- los españoles
- las actitudes igualmente estúpidas de republicanos y monárquicos
- la hipocresía de Jordi Évole
- la hipocresía en general
- que no te paguen y que te escatimen cantidades que son casi simbólicas
- los que se forran y presumen y luego son malos pagadores
- la tacañería
- los que saben vender humo y cobrarlo a precio de oro
- los Compro Oro
- los grupos de música con componentes jóvenes y guapos
- sublimar la juventud como way of life
- mi prejuicio moral de no entrarle a jovencitas
- que la barba esté de moda
- que la barba larga esté de moda
- que la palabra hipster esté de moda
- que los medios usen la palabra hipster como si mis padres la entendieran
- que los medios saquen cosas o ideas de twitter
- que se desechen las viejas fórmulas radiofónicas de contrastado éxito
- que no haya una red de radios universitarias en España
- que se usen edificios públicos en el centro para burocracia y no para, por ejemplo, museos
- los dirigentes del sur
- los dirigentes del norte
- la valla de Melilla y el doble discurso del gobierno
- lo que se convierte en escándalo y lo que no
- que se silencie el juicio y la sentencia al rapero Pablo Hasel
- que se dicten sentencias ejemplares
- la ejemplaridad como medida
- el tema de la honra en la literatura
- los literatos en épocas de hambruna y sus estrategias perrunas de supervivencia enfocadas al marketing más brutal
- los que se venden por un plato de lentejas
- los que venden a su madre por un plato de lentejas
- las lentejas
- el éxito del 100 Montaditos
- el éxito de concursos televisivos de cocina
- el éxito de formatos televisivos estúpidos, insulsos y sin gracia
- el éxito de Jorge Javier Vázquez
- el éxito del verano, sea el que sea
- las imágenes de top less en los telediarios
- las noticias cíclicas sobre datos o sobre tópicos y clichés de la época del año (calor en verano, frio en invierno)
- el calor en verano
- el frio en invierno
- que mis vecinos se piensen que los pinos de la valla insonorizan
- el jaleo de la urbanización en verano
- que mis vecinos tiren la basura los domingos que no se recoge
- que mis vecinos hagan barbacoas como si no hubiese un mañana
- que mis vecinos no saluden al pasar por mi puerta
- que se pierda la costumbre de salir al tranco de la puerta a charlar con el que se pare
- la cultura del pararse a charlar, que se pierda
- que se pierdan las buenas costumbres en general, que no tienen que ver con las convenciones sociales, sino con la buena educación
- que estemos todos sin un puto duro
- que no corra el circulante
- que la gente tenga miedo y no consuma
- que la gente vaya a los bares y no consuma
- los que consumen lo mismo que antes porque para ellos no ha habido crisis
- los que hablan de la crisis en términos ficticios
- los que dicen: Vamos tirando
- los que te preguntan qué tal pero les importa un rábano tu respuesta
- lo de Repsol en Canarias (¡Escándalo!)
- lo del Algarrobico en Almería (¡Escándalo!)
- lo del Nevada en Granada (¡Escándalo!)
- las tasas judiciales
- las doctrinas en política y en cualquier ámbito de la vida
- lo público
- lo privado
- los que no cogen el teléfono si no conocen el número
- los que culpan a los que pidieron hipotecas y los llaman gilipollas por haberse entrampado
- los que culpan a los que son estafados en general
- los que se han aprovechado de la crisis inmobiliaria jodiendo a mi generación
- los que tienen buenos empleos en los público de mi generación
- mi generación en general
- el poco caso que se le hace a la Mala Rodríguez en España siendo una estrella en otros tantos países
- que las estrellas en España no existan
- que el estrellato en España sea para... ¿ex de toreros? ¿cuñadas de tonadilleras?
- que los consejos audiovisuales no le metan mano a los canales de tarot
- que hagan caja con la ruleta desde la SGAE
- que se tolere Radio María
- que se persiga a las emisoras de barrio sin ánimo de lucro y con claros fines sociales
- el panorama de medios en España
- el discurso del miedo
- el discurso del miedo aplicado a internet y a las nuevas tecnologías
- hablar de internet siempre en términos de amenaza
- los que saludan en función del día y de si vas con una chica al lado
- los que solo saludan si vas con una chica al lado
- las portadas de El País
- la portada de hoy (8/06/14) de El País
- el dispendio que se ha hecho con el legado de Polanco
- Polanco
- Felipe González
- El felipismo
- José María Aznar
- El aznarismo
- Que le cambiasen el nombre a Barajas para llamarlo Adolfo Suárez
- Que se creen partidos y tengan éxito
- Pablo Iglesias
- Podemos
- Rosa Díez
- UPyD
- Susana Díaz
- las políticas del PSOE en Andalucía y su pedagogía con sus votantes
- los tertulianos que se han hecho fijos
- Paco Marhuenda
- Javier Aroca
- la paciencia que se tiene con Benzema
- Que el Madrid ganara injustamente la final de Champions
- el desarrollo mediático de la Décima
- el amparo mediático a Ancelotti
- la falta de señorío de Florentino al celebrar el gol en el palco
- la expedición de autoridades al palco
- las autoridades que van de oreja a todos sitios
- los que no saben conducir pero se excusan en que son prudentes
- los que no saben que las rotondas tienen dos carriles y se pueden usar los dos y se debe




NO ME MOLESTA


- Que no se acuerden de mi nombre
- Que no vuelvan a llamar
- Que me chorree el melón en la playa
- Que jueguen a las palas cerca mía
- que griten en la playa
- escuchar conversaciones en la playa
- el top less
- el olor a gasolina
- el olor a crema solar
- el olor a aftersun
- el olor a bolsa de playa
- que me llamen por otro nombre
- que me digan que estoy más gordo o más delgado
- que me saquen parecidos
- que me digan: Te pareces a Rajoy (me jodía antes, pero ya lo he superado)
- que me interpelen con cualquier gilipollez
- que me falten al respeto con humor
- que se metan con mi aspecto
- que se mofen de mi mala suerte con las mujeres
- mi mala suerte con las mujeres
- las mujeres con manías
- las mujeres con problemas mentales
- las mujeres con graves problemas mentales
- las mujeres feministas
- las mujeres chonis
- las mujeres con las que no compartes absolutamente nada en materia de gustos
- las mujeres, sean como sean
- los que te cuentan su vida
- los que les preguntas qué tal  y dicen: Mal, y ya te lo cuentan
- los que te cuentan las cosas pero les importa un rábano tu respuesta
- el sobrepeso
- el pelo de las chicas en coleta que llevan dos días sin lavárselo y le quitas el coletero
- las mujeres que conducen de forma agresiva y controlan del tema
- las mujeres agresivas en general
- la agresividad bien canalizada
- lo bien canalizado en general


Más:
http://josembolivar.blogspot.com.es/2014/01/me-molesta-no-me-molesta.html

Y más:
http://josembolivar.blogspot.com.es/2012/12/me-molesta-no-me-molesta.html

El Refugio del Diablo (documental Los Planetas)















Estos últimos días

Muchas veces escribo estados de facebooks o en twitter, pensamientos o reflexiones que se ajustan a los 140 caracteres, y me lo pienso dos veces, y los traigo aquí, acaban aquí, en el blog, que es donde tengo la total tranquilidad de que nadie los lee. O casi nadie. O se leen de esa forma diacrónica a la que siempre me he referido que templa o directamente hiela según qué temas de debate candente, que pueden ser molestos para terceros que se lo encuentren en su muro o en su timeline de forma fortuita y mira que en twitter me permito más las idas de olla simplemente porque los que te siguen están ahí por voluntad propia y no así en Facebook donde los antiguos compañeros de colegio, de instituto o de universidad o conocidos de vete a saber qué, pues que se traguen tu morralla sin previo aviso pues no es lo suyo, es mejor que haya un espacio para cada cosa o así lo entiendo yo, pero nacen esas movidillas en el marco de un estado de un Facebook o en la limitación ya citada de los 140 suspiritos, de modo que tiene esa declamación de la red social, ese ánimo para decir algo en voz alta y que se nos escuche, cosa que en el blog, aquí, ahora, en estas mismas líneas que estoy intentando rematar no existe, porque esto es aún peor que seguir en twitter, en el que llega al blog personal y se lía leyendo esto, vale de acuerdo, quizá esté buscando fotos de Juego de Tronos, que es la entrada más visitada con mucha diferencia de mi blog, pero aquí estamos, y si aguanta leyendo hasta aquí, pues es que se lo ha buscado él, ya sabéis que a veces en el blog intento cosas absurdas, como por ejemplo, no escribir puntos e ir encadenando comas hasta el infinito o al revés, frases cortas, ráfagas, a golpes, a punto y otro punto y otro punto hasta llegar al final que tiene que ser un gong como mínimo, y casi nunca escribo en serio, quiero decir, cosas a las que les fuera a poner mi nombre o que sea apenas merecedoras de encasquetarles un título, que sean titulables y firmables, pues más bien, nada, que de acuerdo que no es importante porque el blog es un desahogo, ustedes, lectores fieles y pacientes, saben que no hay una particular línea de contenidos y que si el ánimo a veces me desaconseja dar rienda suelta a la voz de diario, de diario de los que se esconden en el cajón, de los que tienen una llavecita y un mini candado, pues saben, lo he dicho mil veces, que nada me gustaría más que contar con una forma de expresarme a lo diario, a lo decir lo que he comido, por ejemplo en instagram fotografío la comida, que es algo que interesa más bien nada, pero es por la presentación, es solo presentación de hecho, pero hace tiempo que quería compartir esta reflexión, desde que le hago fotos a la comida en instagram, como mejor, mejor presentado, pero también más variado, más mejor, por resumir, porque siempre he sido yo muy del bocadillo y de cualquier guarrería o de pizzas a mansalva y una vez que usas el hashtag #pizzatime pues no puedes abusar y que #pizzatime sea todos los domingos, sabéis que en el blog muchas veces la intención es procrastinar, es para eso, mi espacio de procrastinación, y en muchas ocasiones, cuando estoy nervioso, tengo tareas pendientes, llamadas por hacer, aún peor llamadas por recibir, trabajo acumulado o decisiones que tomar que es lo peor de todo, al menos para mí, pues en el blog divago para olvidar, divagar para olvidar, vaya expresión fea pero me ha parecido muy de canción de segunda, en fin, no divagemos que se me olvida lo que quería decir, a lo que iba.

Uno tiene la certeza de que esto no le interesa a nadie, y por supuesto, que no es una conversación, lo intento, en plan rápido, frases cortas, aunque no es lo que he hecho hasta ahora. Ideas. Pequeñas, no complicadas. Palabras cortas incluso. Ella. Es una palabra muy corta. Ellas. Un poco más larga pero aún muchísimo más honda. Ella. Ellas. El blog, para eso. Para todas. No lo lee nadie. Como si fuera una excusa. Justificar. Los bordes. Los márgenes. Justificar. Lo que ni pasa. Lo injustificable. A ráfagas. Casi como si fueran poesías. Evitar el condicional. Evitar el futuro. Presenta. Amplia concepción del presente. Es más alucinado. No tan alucinante. Se entiende menos. Se dice más. O lo mismo. Nada. Casi nada. No lo lee nadie. No es excusa. Evitar el no al comienzo de las frases. Anáfora nihilista. No me acuerdo de las formas retóricas. Me las aprendí en su momento. Las distinguía todas. Debo seguir aprendiendo. Se me da mal aprender. Lo entiendo todo rápido. Y se me da mal aprender. El blog, para eso. Ella. Ellas. Aprender. Como si fuera verdad. Evitar metáforas. No he usado metáforas. No era mi intención. Todo venía al pelo. Una cosa con otra. Ideas. Algo sencillo. Un blog para las ideas. Los estados de Facebook con ideas... El otro día vi en Sevilla un tío con un carrito vendiendo gazpacho, hacer un par de años lo escribí aquí dentro de una serie titulada ideas gratis. Llámalo serie, llámalo etiqueta. Hace semanas que estoy rumiando una ideica, no como la del gazpacho, las que yo considero realizables por mí, no las comento. Tengo mil. No lo dudes. Es como una enfermedad. Eso es lo que venía rumiando. Pasar del tener labia, que bien. A la verborrea, que es una enfermedad. Como una enfermedad, uno toda la vida pensando que es bueno con las palabras y que va, que es que estabas enfermo, amigo. Cómo se come eso. Pues es lo que venía pensando este tiempo, para meterlo en una canción, o darle una vuelta literaria. Las vueltas literarias estaban también en el origen de este blog, todo lo que tiene que ver con los libros, he confesado lo poco que leo últimamente, para mí decirlo aquí es como confesar el peor de mis pecados, de mis muchos pecados, el más feo: no leer, no quepa duda, y me refiero a papel, a libros, a revistas, a lo que sea, porque en internet estoy leyendo todo el día, tonterías me atrevo a añadir, pero no es eso lo que realmente le empapa a uno, y empaparse es fundamental, o para mí lo ha sido siempre, a la hora de hacer canciones o escribir lo que fuera, que siempre ha sido un acto de desembarazarse de algo, me cuesta usar las palabras, deshacerse de algo que te pesa, quitárselo de encima, una melodía, una idea, unas palabras. Ideas. Palabras. Tonadas. No lo entiendo como algo artístico, sino terapéutico. Volvemos a la enfermedad. Se ve de otra manera. Los que te llaman artista como si fuera un insulto no me parecen mucho peores que los que dicen que su arte les ayuda a hacer terapia, son estupideces, de las muchas que se escuchan y se repiten sin pensarlo dos veces, hay que tener cuidado con eso, hay que ser muy cuidadoso a la hora de elegir los tópicos que vas a reproducir y no te creas tan listo como para librarte de los tópicos, eso es un tópico, y no hacerlo, es otro y así sucesivamente hasta el infinito, pero lo eliges, siempre puedes elegir y eso es lo importante. En lo que te sale, de una forma, llamemos natural, parece que no hay elección pero por supuesto que la hay. Paro un segundo. Y pienso: ella. Qué estará haciendo. Esa pregunta retórica es fatal. Le siguen las peores. Con quién. Dónde. Las cinco W. Esto no es la botella que lanza un naúfrago. No lo soy. Más mal que bien, voy flotando. Pelín a la deriva. Pero braceando todo lo que se puede. No usaría metáforas, mal. Lo he hecho. Que ella no lo lee. Es lo que quería decir. Nunca lo hizo. Me hacía daño con eso. Una vez me dijo: Tienes un blog genial. Pero si no lo lees, amor. ¿Por qué dices eso? ¿Porque era de lo poco que parecía importarme por entonces?  Piensas demasiado. Si me dieran un euro por cada vez que alguien me dice: Piensas demasiado. Tengo respuesta siempre. ¿No será que tú piensas demasiado poco? Pero no la suelto con todo el mundo. Generalmente me lo dicen chicas. Piensas demasiado. Ponedle voz melosa. Como de gatica. Piensas demasiado. A veces el "piensas demasiado" significa tírate encima mía a la voz de ya y hazme pedazos, y otras veces el "piensas demasiado" significa que vaya películona que te has montado con la chavala que ella ni se había puesto en tesitura de tener algo contigo y que básicamente lo flipas. Piensas demasiado. Demasiado todo, por resumir. No es cierto. Trato de pensar lo justo. Podría pensar mucho más. Podría penar mucho más. Me permito alguna licencia poética. Frases cortas. Pensar. Mucho, poco. Magnitudes. Marco de referencia. La x. La y. Qué es mucho, qué es poco. Tírate encima mía y hazme pedazos, ojalá fuera siempre eso. Ella. No solía decírmelo. Nos hacíamos pedazos. Bien casi siempre, algunas veces no. Alguien me dijo hace poco: Era una egoísta. Y eso me apenó mucho. Algo tan sencillo. Egoísta. A veces uno siente que tiene lo que se merece y los egoístas igual se reconocen, se huelen el culo, se siguen y acaban juntos queriéndose de verdad a veces y coincidiendo en ello otras, cada uno con sus intereses particulares y a veces coincidentes, lo que me parece, por mucho que se adorne, atroz. Amor egoísta. Desde el ego. Nos lo destruimos mutuamente. Ella me robó el mío, pero yo, a mi manera, le dejé el suyo hecho un asquito también. En fin, esto parece un diario. Podría hablar de los conciertos a los que voy y dejarme de gilipolleces, de robos de ego y de ellas en general. Porque si de ella no estoy currado de espanto, de ellas estoy espantado permanentemente. Espantado, amigos. De lo que hay ahí fuera. Terror. Y está reciente y es difícil hablar de ello, quiero decir sin meter la pata. Ellas. De todo tengo. Ellas. La que es amiga. La que quiere ser amiga. La que nunca será amiga. Las que vienen de fin de semana, que son la categoría estrella pero que, amigo, no se dejan las preocupaciones en casa, que digo yo, si te vas de fin de semana, pues a darlo todo, pero no. Es una suerte de turismo sexual las ciudades de provincias con fama de marcha nocturna de la que se podría escribir si no un libro, unos cuantos relatos con cierta enjundia y es divertido, en resumen. Con esas sí que no puedes pensar demasiado. Sota, caballo y rey. Sus tiempos. Van sus tiempos. En fin, son aventuras, ojalá las pudiera contar aquí sin tapujos sin ese molesto zumbido que noto en la oreja, como si me susurrase un abejorro haciendo de Pepito Grillo, porque tampoco es que sean nada malo, digamos, y dejarlo indicado me parece peor, por aquello de querer hacerse el interesante, tampoco es que mi historia sea única, la vida del treintañero soltero se enmarca en unos tiempos muy similares, venimos baqueteados, le valemos a veinteañeras aventureras y a señoras aún curiosas, el marco es amplio, es cierto pero la soledad de los domingos, no es la de los veinte años, en la que te ibas a un mirador con un litro de cerveza y estaba todo arreglado, es otra cosa, o es que yo me lo monto así, en el mes de abril (¿quién me ha robado el mes de abril?, oh dios, como odio esa canción) hice una canción cada domingo y luego el domingo noche me preparaba para los envios de mailing y de búsqueda de conciertos de Enrique Octavo, que es el nombre de mi grupo de música como muchos ya sabéis y los que no, deberíais. Total, que los domingos eran para Enrique Octavo. Era mi novia. Eso lo digo ahora, no es del todo verdad. Creo que ya os he hablado de eso aquí. Lo de los grupos de música y las novias. A las novias de los de mi grupo las llamo las Teclistas Invisibles. Ellas afectan al sonido de la banda aunque no lo sepan. Yo lo sé. Me monto películas, es cierto. Pero vaya. Que no es grave. Creo. ¿Es grave, doctor? Aunque tengo meridianamente claro que es más próximo a la enfermedad que al conocimiento, ese límite me parece apasionante en términos generales. Pasión, qué otra cosa nos queda. Las novias. Los grupos de música. Tener un grupo de música es como tener tres novias. Lo habréis oído decir eso alguna vez. Los grupos de música son como las novias. Te cansas, pues te cansas. Lo dejas, pues lo dejas. En fin, esas cosas. No estoy de acuerdo en absoluto. Los grupos son o deben ser mucho más sencillos que las novias. Vas, te enchufas, te cuelgas la guitarra y tocas. Una lista que está en el suelo. Tocas en orden la lista. Terminas y quedas al día siguiente. Es fácil. ¿Son así las novias? No, no hay lista en el suelo con las novias. No llegas, tocas y te vas. Que es como deberían ser los grupos, en general. Que luego hay peña que le gusta hacer debate o que compone hablando. Se compone tocando, opino yo. Y mira que soy hablador. A los de mi grupo se lo tengo dicho, lo peor mío son las charlas motivacionales sobre el grupo. Procuro espaciarlas para que no pierdan su efecto. Motivantes. O centradoras. O de objetivos. Me salen bien. Pero soy un palizas de cuidado. Llegas, enchufas, tocas, te vas... Otra cosa es viajar. Viajar es jodido siempre. Quien no ha hecho viajes con chicas que no conocía realmente pensando que en los hoteles iba a ser como una luna de miel sin parar de follar y al final no, el viaje ha terminado como el rosario de la aurora y todo ha sido un despropósito. Pues eso. Viajar es siempre difícil pero ensayar y sacar canciones no debería serlo, es más, a mí me divierte. No entiendo a los músicos a los que le aburre ensayar. Vamos a grabar en breve, eso debería escribirlo en otra entrada. Ya he grabado otras veces, debería recopilar todas mis experiencias en torno a lo de grabar, todo traumático. La verdad, mal. Siempre mal. Siempre me ha parecido una mierda. Siempre te lo dicen. Es que uno mismo se oye su voz y le parece una mierda. Pues sí, pero es que me la han grabado siempre como una mierda. Puedo hacerlo mejor, estoy casi seguro. Todo lo que he grabado siempre ha quedado mejor a primera toma, lo que demuestra que me han guiado muy malamente y que la parte instintiva era la que lo petaba pero quizá esto no sea más que una burda excusa. Y mi estrategia típica de echarle la culpa a los otros. Los otros. Las ellas. La ella. Los demás. Todos vosotros. Los lectores silentes de mi blog, los dos o tres. En fin, vosotros nos sois culpables de nada, tenéis el cielo ganado más bien. En el blog me gustaría mucho más hablar de mi grupo que divagar sin rumbo, con el grupo se viven cosas únicas, que puede que sean vulgares a veces, o que no sean, cómo decirlo, épicas, que sean más bien cotidianas, de andar por casa, muy miserables en ocasiones en lo que corresponde al pecunio y al aprovisionamiento de víveres, pero son únicas. Con el grupo te pasan cosas únicas. Eso es un enganche que no veas. Esa cosa especial de ir a nosédónde a tocar ante noséquién. Es fin, quizá sean obviedades. Que antes era una etiqueta preferente en mi blog, las obviedades. No sobre música o grupos, en general. Lo obvio. A veces me hacía eco de noticias o de movidas que eran tan cantosas, tan exageradas, tan abusivas, tan injustas y usaba el blog, a mis cinco o seis visitantes diarios para airear esas cosas chungas, noticias casi siempre. Y las campañas de comunicación. La comunicación, en general. Que es con lo que intento malvivir, claro que esto está a mil millones de millas de ser un espacio profesional, que es algo que pienso con frecuencia, pero tener un blog para trabajar me apetece menos tres. En resumen es un espacio libre, que es lo que siempre quise tener. Un espacio libre para divagar, para desahogarme... Para escribir sobre ella... Para usar todos los puntos suspensivos que me salgan de las narices... Para no atender a la forma.... Para igual hablar de política que del disco que estoy escuchando... Para perder el hilo... Para no tener hilo... Y me pesa a veces tanta premisa inútil de la que parte todo y que está bien que así sea pero que me pesa, siendo sinceros, porque podía escribiros cosas mucho más interesantes, mini crónicas, de los conciertos en los que he estado, lo que he visto... Cierto es que hace poco le decía a un colega, en plan vacilada, es que a mí por las crónicas me pagan... Y luego me contestó que cuánto y fue cuando tuve que agachar la cabeza, es bueno que el blog no sea para eso, para sacar pecho. No recopilo aquí ningún artículo ni nada de eso, tampoco es que haga tantos, eso es cierto. Poco pecho hay que sacar pero que no lo hago, porque eso tiene poco que ver con ser libre. Y me permito escribir con jerga, la mía además... Y decir que algo es tocino de cielo refiriéndome a muy bueno o que es una clase de spinning, para algo jodido o tedioso. Y permitirme las erratas, que es un tema a tener en cuenta también. Y es como que tener un blog que no lee nadie y escribir entradas interminables, te permite llegados a este punto, reconocer que no son siete veces lo que te acuerdas de ella al día, que son setenta. Y no sé por qué. Y que ellas dejan un vacío que aterra, una hondura de pozo seco que en los días malos, uno se figura que va a ser de por vida y te deja mal. Mal en general. Tengo un litro de café con leche aquí a medio metro de mi mano derecha, nada puede salir mal. Pero el mal en general del que hablo es otro. Y todo esto, es animismo. Quiero decir, que no se sustenta por nada serio, no hay datos al respecto. Es como el miedo ese de quedarse solterona, es un miedo atávico. Y utilizo el femenino pero me lo aplico porque en el atavismo hay mucho género, es inevitable. Esas mierdas del género son totalmente ella. Me llamó hace poco, estaba apagado gracias a Dios. Gracias a Dios. Un viernes a las 21 y 5 horas. A quién se le ocurre. Y desde su atalaya de felicidad, me imagino. Y ojalá así sea, pero queriendo poner una conferencia a mi desierto del Sáhara emocional, no es de recibo, amigos. No es de recibo. Nunca más se supo. Hará tres semanas, quizá cuatro de eso. No había registrados otros movimientos desde Febrero, que ya han pasado meses. Pero está ahí. Como al acecho. Que yo también tengo lo mío, de acuerdo, escribiendo esto. Pero yo no tengo atalaya y felicidad muy poca. Que es que como meta ya la he descartado, la felicidad, digo. Hay que aplicar lo del príncipe de Maquiavelo, pero al revés. La felicidad no es el fin. Pero eso necesita otra entrada. Me martiriza el acecho, si soy sincero. me veo como un cervatillo. Cualquiera que me conozca en persona dirá que soy felino como mínimo o que araño o que la lio con los cuernos, si es que de verdad me aceptan como cervatillo, y es todo verdad, qué le vamos a hacer. La felicidad son los medios, que no tengo muy claro lo que significa pero tengo totalmente claro que es así. Y también tengo claro que la felicidad no está en las atalayas, sean de lo que sean, de cañas, de barro, de hormigón o de marfil... No. Por otro lado, la felicidad está sobrevalorada. Me conformo con estar contento la mayor parte del tiempo, que parece poco pero lo es todo. Contento. Contentillo. Y a poder ser, con motivos. O sin ellos. Que es lo que me parece el great logro de todo el asunto y es a lo que iba. A lo que iba. En serio, todo esto solo ha sido una introducción. A lo que iba. Estar contento sin motivos. Eso. Sin motivos. Eso es de lo que quería hablar.

Disociar el estado de ánimo de lo que realmente te ocurre. ¿Me explico?  No es un ejercicio de ficción para estar contento sin motivos. No es eso. Es una recalificación de motivos. O una nueva graduación, como las millas, como las leguas... Otra movida. Otra forma de pensar. La forma de pensar lo es todo. El poder de la mente y todas esas mierdas. Ese era más mi rollo. Ella estaba en el género y yo en el mentalismo. Su racionalidad lo arruinaba todo. A mí lo del género siempre me pareció apasionante pero no le daba alas para que no se volviera loca del todo. Conmigo fue con el primer hombre con el que consideró afeitarse el bigote y efectivamente, lo hizo. Yo pienso en eso y me emociona. Soy más tonto que una bola de paja, lo reconozco, pero es la verdad. Aquella pelusilla a la que renunció, esa pelusa con tanto significado, con la que rasuraba en parte sus principios de género y depilación, un tema que me parece apasionante que queréis que os diga, la depilación en general me resulta un tema interesante del que hablar, sobre todo si se trata de partes íntimas, pero yo tengo claro que si fuera una mujer tendría trauma con la cera y las cuchillas, pero bueno, esa renuncia a la pelusilla de ella en beneficio de nuestros besos, sí, de nuestros besos, de la suavidad de nuestros besos, de su mejoría, de lo deslizante en los chuperreteos... Ni amor ni leches. Era una cosa con un fuerte arraigo físico, de siempre, desde siempre y conste que no he puesto la carne en el asador, quiero decir, o lo que quedase de carne o simplemente revolver las ascuas, caso de que no quedase nada de nada de carne, que nunca hemos vuelto a vernos en persona. No quiso. Había dicho que nada de metáforas y mira que estoy siendo claro y detalloso. Que no detallista. Pero la metáfora a veces me puede. No soy de decir mucho te quiero. Alerta diario. Cuidado con las cursilerías. Es cierto. No soy del te quiero. Nunca lo he sido. Soy ese tipo de mala persona que se guarda los te quieros para los momentos mágicos y que tiene el listón de momentos mágicos sumamente alto, pues sí. Así soy. Es lo que me han enseñado en cierto modo también. Lo de los listones. Como siempre, la culpa a los otros. Pero es lo que realmente siento, en la gestión de emociones. Desde muy pequeño, soy un master en lo de la contención. Contener. No me cuesta casi nunca, contener. No me rompo. No suelo hacerlo. Muy pocas veces que recuerde. De las últimas veces cuando ella se fue y hace años. Años. Me da casi vergüenza ponerlo por escrito. Años. Joder, es demasiado. Después volvió y volvió y volvió. Pero realmente hace años que se fue y este que viene va a ser el primer verano sin vernos. Pensar en eso me destruye un poco también, pienso en los veranos anteriores, en los viajes anteriores... Todos o casi todos un desastre. A ella le gusta reservar. A mí me gusta ir sin reserva. A ella le gusta llevarlo todo más o menos calculado, a mí al contrario. Y dormir al raso, eso nos gustaba a los dos. El verano pasado, y parece que fue hace un siglo. Por otro lado, tanto contar esto por aquí me da un rubor que flipas. Que nadie lo diría, pues sí, pero me lo da. De verdad. Al amparo que nadie lee esto. La alerta diario está totalmente disparada. Ella no lo lee. No lo leía entonces, menos ahora. Desde la atalaya... Ojalá nunca más me llame, ni nos veamos. Me parece mal que lo haga. No sé si está tan bien como yo me imagino, ojalá que sí. Se lo merece, joder. Es una chica estupenda. Y que esté bien, de alguna forma que me cuesta reconocer, me alegra. O por lo menos me alivia más que cuando estaba mal... Profundamente mal y me llamaba para que la ayudase. Me alivia. Ya no llama para eso. Lo peor es por lo que me figuro que llama... Por lo que pongo o dejo de poner en el Facebook, no es mi amiga, me borró ella pero tiene espías... Yo no he podido mirar su Facebook. ni su twitter desde entonces, sigo sin hacerlo. Tengo amigas que me dicen que estoy fatal. Que estoy colado por ella. Yo no lo creo. Nos hicimos tanto daño, mutuamente. Y luego es tan egoísta, fue tan egoísta y a la hora de entregarse, fue una entrega creo que la de los dos, tan egoístas... ¿Me pasará eso siempre? Ojalá que no. Ojalá que no sea yo así, me temo que sí. Que es mucho de lo que soy. Ahora, que aprender, aprender he aprendido mil cosas. En eso le doy la razón, porque hacía mucho hincapié en aprender. Lo importante es aprender. Cuando la cagabas o algo no salía bien, era lo que decía, lo importante es aprender. Pues no. Yo me negaba. Hay que ganar. Hay que perder. Hay que asumirlo. Contentarte con que algo has aprendido, era como perder sin dolor. Aún pienso así en cierto modo. Se gana, se pierde. No es importante participar, eso es solo el principio. Participas, y ganas o pierdas y ya está. Y las cosas son así. Un triunfo. Una palmada. Un éxito. Un fracaso. Y no lo que ella decía: un aprendizaje. Todo es un aprendizaje. Pues no. Y sí, lo es. Pero no acepto que se quede ahí la cosa. Déjame perder con todas las consecuencias. Déjame perder sin aprender nada. Solo sentirme derrotado. Que es lo que toca... En fin.... Se me va.... Se me está yendo de las manos.... A más puntos suspensivos, peor voy en mis divagaciones.... Eso es así... Desde siempre.... No me corto con los puntos suspensivos... La gente les tiene manía... Cómo es la gente.... A mí me gustan.... No lo flipo.... Pero me gustan.... Me relajan.... Para leer.... Me relaja leer puntos suspensivos.... Siempre los defenderé...

Me iría mejor el domingo escribiendo canciones que haciendo entradas de blog, no me cabe duda. O trabajando en el huerto que lo tengo olvidadico.
Procrastinar. Ya lo decía. Es para esto también.

sábado, 7 de junio de 2014

A mí Airbag me deprimen

...y me encantan.
Supongo que la gente se deprime con Damien Rice o Leonard Cohen, pues a mí me deprime el estilo ramoniano que es movidillo y acelerado, y las letras, en su mayoría, no es que sean especialmente tristes. En el caso de Airbag particularmente, igual las letras...
No sé, tienen un toque melancólico en algunos casos... A mí me parecen unas letras buenísimas en general y los discos los he escuchado a tope cuando han salido. En el coche. Una y otra vez. Y después los he dejado. Y alguna vez, hace poco, en un bar han puesto una canción y he flipado. Hace una semana, en la Percha, una de Alto disco. No sé cuál. No recuerdo. Tus rechazos golpean dos veces. De mis favoritas. Ahora mismo suena Cubo de Rubik, menudo hit. En fin. Ese disco me recuerda a una chica. Otros, a otras. Es que llevan mucho tiempo. El amor dura menos que los grupos. Por suerte, claro.
Pues nada, que esta tarde de sábado tengo la moral por los suelos y estoy escuchándome los discos enteros de Airbag, para hacerme pedazos.

Ahí van.









Esos tres son mis super favoritos.

Y ya para hacerme trizas del todo...



Y mi super favorita de ahora mismo....



Pues nada, eso es todo.

Bajona de sábado sin motivo aparente y mucho rítmillo.

Leticia rockera Ortiz

Si uno solo lee el titular, te piensas que a Josele le ha dado un vahído, pero no... Hay que leer lo de dentro. (ejemplo perfecto de disociar lo que se quiere decir, para cuadrar un titular que suene a lo que el redactor quiere colarle a su jefe) http://www.europapress.es/cultura/musica-00129/noticia-enemigos-si-letizia-ortiz-quiere-vernos-concierto-llame-invitamos-todo-20140606123716.html

viernes, 6 de junio de 2014

Crispación en la puerta de una sala de conciertos

Ayer se bajó de un Range Rover un tipo con signos claros de embriaguez, dejó el coche en marcha y las luces encendidas, y a los que estábamos en la puerta de la sala Planta baja nos gritó: "Arriba España" e hizo el saludo fascista, instando a los que estábamos allí a que hiciéramos el mismo saludo, bajo amenazas. Éramos alrededor de veinte personas en tres o cuatro grupos. "Que ya tienes un rey nuevo", le dijo alguien. "Yo no quiero rey, ¡yo soy de Franco!", gritó. Deberíamos haberle dado una paliza pero nos quedamos todos bastante estupefactos con el numerito y el tío iba salido del pellejo, de eso que dices, lo mismo saca una escopeta que un machete. Iba otro en el asiento del copiloto. En otra época de mi vida cuando me sentía más un superhéroe, eso no hubiera quedado así. Pero bueno... Es lo que hay, amigos. Estuve a punto de quedarme con la matrícula, llamar a la policía y por lo menos, que lo pillaran más arriba, y que le hicieran el test de drogas y alcoholemia pero no lo hice. En Alemania por ejemplo un tío que hiciera eso estaba en la cárcel ipso facto y recibiría el oportuno opobrio social en masa y sin reservas. Aquí, no. Los que defendéis al Rey, la bandera, la patria y la madre que los parió, decidme sinceramente qué hacemos con tipos de esta calaña que obligan a otros, que han ido a ver un concierto, más concretamente de cumbia, a hacer el saludo fascista. En serio, amigos patriotas, ¿qué hacemos en estos casos?

miércoles, 4 de junio de 2014

He hecho un cartel para Enrique Octavo








































Para conciertos de verano... Seguiremos informando.

Queridos amigos monárquicos y republicanos

Queridos amigos monárquicos,
Os respeto pero... ¿no sería mejor que lo del Rey fuera simbólico, no retribuido, como ser presidente de la Comunidad de Vecinos, y que al Rey y a toda su familia le diéramos menos dinero del de todos, lo justo o incluso nada para tener menos poder, y su familia, ninguno, para que también se le pidieran e hicieran menos favores, menos reverencias, con menos yernos, menos bussiness, menos influencias, menos inviolabilidad, menos oscurantismo y más credibilidad, más trasparencia, menos presupuesto, menos lujo pero los mismos discursos, los mismos desfiles y los mismos honores pero a coste cero si se pudiera, para que terminarse como son hoy en día los condes y los duques, casi desconocidos y muchos de ellos más bien escasos de liquidez y sobre la bandera, que podéis llevar con orgullo, no dejéis de ser conscientes de que a causa de esas franjas hay gente (mucha) que ha muerto y puede que para algunos no sea simplemente como el escudo de un equipo de fútbol, o que no les guste verla, por más libres que seáis de llevarla de pulsera o en el cuello del polo, cosida en el bolsillo o en la infinidad de variables textiles que conocemos y que eso sea casi un insulto para algunos por el anterior motivo citado?
y....
Queridos amigos republicanos,
Os respeto pero... ¿no sería mejor que la Republica, la tercera o la que fuera, se asentase sobre una base más sólida y no en una alborotada reacción a una decisión de un antagonista que plantea, se supone, una agenda en pos de sus intereses, y demandarla, defenderla y promoverla desde los cauces legales y democráticos que posibiliten una consulta, un referéndum o un plan de ruta al menos, teniendo en cuenta errores del pasado, de la primera y especialmente de la segunda, para establecer una serie de garantías legales que no permitan reproducir modelos injustos y sean tolerancia cero con alzamientos de bienes, desfalcos y trinconadas variadas, y sobre la bandera republicana que podéis llevar con orgullo, o incluso mostrar y defender en la calle, pero no dejéis de ser conscientes de que a causa de esas franjas hay gente (mucha) que ha muerto y que es delito, ultraje creo, cambiarla por ejemplo de un lugar público por muy poético o simbólico que sea el momento o que puede haber personas a las que les ofenda o se sientan amenazas, o para las que sea casi un insulto simplemente verla por el anterior motivo citado?

¿Es tan difícil entender esto, penosos compatriotas y sin embargo amigos?
Mi propuesta: una franja negra en la bandera para que entendáis todo lo anterior.
Los unos y los otros ¡qué jartico me tenéis!


lunes, 2 de junio de 2014

Cuestiones regias en mi blog, un, dos, tres, ¡Fuego!

Los medios no hablan (ninguno) de referéndum. Las redes sociales se centran en ello.


Luego hablan de crisis de la prensa, crisis de los medios... Y los diez mil periodistas despedidos... Pues. Por suerte tenemos los trendig topics de twitter para ver que no es lo que dicen los medios que importan, sino que el algoritmo de la notoriedad ya no es feudo, ya no es un coto privado de caza, de los medios de comunicación tradicionales...Qué mal me he expresado. Los diez mil periodistas despedidos con lo que más me preocupa. Por lo que me toca. Y creo que los medios no se enteran de lo que pasa en la calle... O se enteran y lo ignoran. No creo que no se enteren... Lo ignoran a posta. A cosa hecha, como se dice por aquí. Por intereses de terceros, no nos quepa duda. Y se les llena la boca...

La abdicación del Rey....
Tengo varias teorías al respecto.
La primera.... Ya conocen la sentencia del Caso Noos. A Urdangarín le van a venir mal dadas, de modo que, antes de que llegue la debacle, pues mejor no lo quitamos de en medio lo de la sucesión y no se nos lía la movida una vez que se haga pública y la degluta la opinión pública, vayamos a que luego le demos arcadas al pueblo...
La segunda... Temas de salud. Ya he compartido aquí en otras ocasiones mis dudas razonables sobre el estado de salud del jefe del estado. No es que me guste especular con los achaques de terceros, es un tema de comunicación, por eso me ocupaba de ello. Cómo se trataría el caso, si fuera cierto... A eso iba. Se taparía, esa era en resumen mi conclusión. Se taparía, como se han tapado tantas cosas de la vida privada del rey. Hoy le decía a mis padres... ¿Es que vuestra generación no estaba preparada para la noticia de que el Rey y la Reina se separaban, se divorciaban? Ellos me han dicho que sí, muy rotundamente. Tan claro no lo tengo... Pero ,,, No sééééé qué pereza, ¿no? Los prejuicios y tal...


Dejando a un lado la conspiranoia de las cinco y media de la tarde, ¿qué queríamos, activar a los republicanillos? Porque se le ve animaillos, aes ¡buen trabajo! ¡buen trabajillo, comunicación de la Casa Real! Sois lo más.
Es que es pa verlo...eh.... Que buen plan para activar a los republicanos.


Voy a ir añadiendo cosas según lea o escriba por ahí comentarios....
En plan irónico... He dicho que deberíamos invertir en nobleza, que un rey es poco, que deberíamos tener más duques y condes, como medida contra la crisis. Que crezca la corte, más a más... Claro que sí.

Qué pereza lo de jornada histórica...
Como si no lo fueran todas.

domingo, 1 de junio de 2014

Their Satanic Majesties Request (full album)





De mis discos favoritos de siempre.

Me acuerdo de ella siete veces a día

Es curioso que escribiendo esta entrada se me haya ido la luz y no se haya guardado. Quizá sea una señal de que no es interesante, ni buena idea, publicarla. Obstinado como soy y como sabéis pues no me rindo tan fácilmente porque se vaya unos minutos la corriente. Vuelvo a intentarlo. Es de amor. O de lo contrario, lo que viene. Lo que viene a continuación y lo que viene después del amor. El desamor. Pero ya ni eso. Es casi más un tema de memoria. De clics. De tics. Es una onomatopéyica forma de recordar. A golpes. A ruidos. Sé que se me va a olvidar, lo sé porque tengo una memoria de combate que sabe muy bien de lo que hay que librarse para seguir reptando por la vida, pero el otro día, conduciendo, pensé... Y si no, si no se me olvida esta vez... Da para letra de canción. He hecho cálculos. A mí, dentro de mi tedioso desorden, me gusta tenerlo todo controlado, incluida la memoria. Pensar en ella no asegura nada porque los recuerdos se deforman. Aparece. No a causa de nada, no por nada. Es como un reflujo gástrico. Es cierto que siempre he estado en contra de los protectores de estomago. No me fío. Ella. Quizá no sea por nada. Quiero decir no sea por ella. Solo aburrimiento. Creo que tiene que ver con la química. La casa está desinfectada. Lo quemé todo. A quien se quiere de verdad, luego hay que quemarlo. Simbólicamente. Sus cosas. Sus cartas. Sus papeles. Incluso sus regales. Todo fue a la chimenea y por ese lado, bien. Pero no es un tema de hacerse ceniza o no. Es otra cosa, soy yo, descubrí. Soy yo. Pienso en mí con ella al menos siete veces al día. No es del todo cierto. Ella. Es algo grande ella. Con sus cosas. Sus temas. Me da curiosidad eso. Cómo le irá. Cómo habrá ido saliendo de una en otra. Esas cosas. Son tonterías y en el fondo no me interesan tanto, esa es la verdad. Pero viene. A veces con insistencia, como el otro día en la estación de autobuses. Hacía años que no cogía un autobús y antes, solo iba a las estaciones, a por ella. Ella era todas las estaciones. Especialmente, el otoño.